Salsa con tomates frescos un aderezo perfecto para preparar en verano cuando los tomates son los protagonistas indiscutibles de los huertos, o, para quien no tiene un huerto, puede comprarlos a un precio conveniente en el supermercado sin tener que pedir un préstamo.
Para preparar la salsa con tomates frescos, he utilizado los tomates perini, que contienen mucha pulpa y mucha menos agua y semillas en comparación con los tomates corazón de buey o los de ensalada, pero, en caso de no encontrar tomates perini, cualquier otro tipo de tomate que encuentres puede servir, incluso los cherry o datterini.
Para preparar la salsa de tomate, debes lavar y limpiar bien los tomates, luego dejarlos cocer hasta que estén bien blandos y después pasarlos por un pasapurés para obtener un puré liso y homogéneo.
Después, condimenta la pasta que más prefieras, aunque yo, obviamente, te recomiendo una excelente pasta fresca hecha en casa, como las tagliatelle o los ñoquis de patata.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Fuego
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano, Otoño
Ingredientes
- 500 g tomates perini
- 1 diente ajo
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- albahaca
Herramientas
- 1 Pasapurés
Pasos
Lava los tomates frescos bajo agua corriente, eliminando cualquier impureza, luego sécalos y córtalos en cubos pequeños, eliminando el tallo.
Recoge todos los cubos de tomate en una olla amplia.
Cocina los tomates a fuego alto durante unos minutos, removiendo de vez en cuando, luego añade la sal. Esto ayudará a que salga el agua de vegetación de los tomates.
Cuando los tomates estén bien cocidos, calienta un chorro de aceite en un segundo cazo. Añade un diente de ajo pelado y machacado y deja que tome sabor a fuego alto. Después, vierte la mezcla de tomate en el pasapurés o en un colador de malla fina y pásalo para obtener un puré liso y homogéneo.
Pasa toda la mezcla hasta obtener toda tu salsa con tomates frescos. Sazona con las hojas de albahaca fresca y deja cocer durante unos 20 minutos para que toda el agua en exceso se evapore y quede solo una salsa de tomate bien concentrada.
CONSERVACIÓN
Conserva la salsa con tomates frescos en la nevera, cerrada en un recipiente hermético para alimentos, por un máximo de 3 días.
Si lo deseas, puedes envasar al vacío la salsa de tomates. Solo tendrás que transferirla a tarros de vidrio esterilizados y, una vez llenos y bien cerrados, hervirlos en agua durante media hora para crear el vacío. De esta manera, podrás conservar la salsa de tomate hasta 6 meses en la despensa.