Hoy he preparado la pasta fresca al huevo colorida, perfecta para lasaña y raviolis. Facilísima y súper buena. Yo he elegido los colores clásicos que tenía en casa, pero se puede experimentar con muchas variantes y combinaciones. Para el verde he elegido las espinacas, para el violeta la remolacha y para el amarillo el azafrán (se me había acabado la cúrcuma). Yo he decidido hacer la pasta al huevo, pero también va genial simplemente con sémola y agua.
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- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 1
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 300 g sémola remolida de trigo duro
- 3 huevos
- 300 g sémola remolida de trigo duro
- 2 huevos
- 1 cucharada espinacas, cocidas, hervidas y trituradas
- 300 g sémola remolida de trigo duro
- 2 huevos
- 1 cucharada remolacha precocida triturada
- 300 g sémola remolida de trigo duro
- 2 huevos
- 1 pizca azafrán (diluido en 30 gr de agua tibia)
Herramientas
- Amasadora
Pasos
El procedimiento es muy simple. Se ponen todos los ingredientes, para cada color, en la amasadora y se trabaja con la pala por unos minutos.
Cuando la masa forma una bola, se retira de la amasadora, se compacta sobre la mesa de trabajo y se envuelve con film. Se conserva en la nevera hasta el momento de usar.
Yo en la pasta fresca no pongo sal porque la pongo abundantemente en el agua cuando cuece, pero vosotros podéis añadirle una pizca.
