Panna cotta con guindas, un postre de cuchara fresco y delicado para servir al final de la comida, pero también para merendar. La panna cotta es uno de los postres de la repostería italiana más conocidos en todo el mundo, que se puede disfrutar solo o enriquecido con chocolate u otros toppings. Hoy os propongo la versión con guindas en almíbar.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 6 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la Panna cotta con guindas
- 400 g nata fresca líquida
- 110 g leche entera
- 80 g azúcar
- 8 g gelatina en hojas (cola de pescado)
- 1 cucharadita aroma de vainilla
- q.b. guindas con almíbar
Herramientas
- Moldes para budín
Preparación PANNA COTTA CON GUINDAS
Pon las hojas de gelatina en remojo en agua fría durante unos 10 minutos.
Vierte en un cazo la nata líquida y la leche. Pon el cazo en el fogón y calienta a fuego bajo; cuando la mezcla de nata y leche esté a punto de hervir, apaga el fogón.
Escurre la gelatina y estrújala ligeramente, luego sumérgela en el cazo con la nata caliente y mezcla con una cuchara o un batidor de mano hasta que la gelatina se haya disuelto completamente. Debes obtener una mezcla homogénea y sin grumos.
Distribuye la nata en 4 moldes con una capacidad de unos 150 ml.
Cubre los moldes con las tapas correspondientes o con film transparente y mete la panna cotta en el frigorífico a solidificar durante al menos 5 horas.
Cuando sea el momento de servir la panna cotta con guindas, desmóldala y pásala a los platillos individuales. Espolvorea la parte superior con las guindas con almíbar.
Notas
Puedes eliminar la leche utilizando 500 g de nata.
Los moldes que he utilizado hacen que la panna cotta se pueda desmoldar con mucha facilidad. En práctica se hace así: se quita del molde la tapa más grande, se coloca el platillo en lugar de la tapa y se voltea el molde. En este punto se retira la otra tapa, que ahora se encontrará encima, y el dulce cae, depositándose sobre el platillo. Si no tienes este tipo de molde y usas uno normal, sumerge el molde por unos instantes en agua hirviendo, luego desmolda la panna cotta inmediatamente en el platillo.
Puedes sustituir el aroma de vainilla con una bolsita de vainillina. O, para un resultado aún mejor, utiliza una vaina de vainilla.
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