Los ñoquis de polenta a la romana son un primer plato rico y sabroso que se prepara rápidamente, especialmente si, como yo, tienes mucha polenta sobrante (deliberadamente dejada del día anterior para esta receta). Los ñoquis a la romana que también puedes hacer en ñoquis de calabaza a la romana se preparan con sémola, pero si te sobra polenta y estás buscando una idea gustosa para reciclarla, aquí están, listos para comer. Puedes hacerlos redondos como los ñoquis a la romana clásicos si, antes de que la polenta se enfríe, formas un buen rollito para envolver en film transparente y lo cortas en rodajas. O si tienes la polenta extendida en una fuente y quieres evitar desperdicios (se crean pequeños restos con el molde redondo), te bastará con un moldito cuadrado. A mis ñoquis de polenta a la romana no les añadí más que mantequilla, salvia y parmesano, ya que tenía una polenta con trufa ya muy sabrosa, pero si lo prefieres o necesitas prepararla especialmente, puedes añadirle espinacas a la mezcla. Creo que te he dado bastantes ideas en estas primeras líneas. Yo voy a la receta. ¿Vienes conmigo?
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- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4/6 personas
- Métodos de Cocción: Horno, Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
Para preparar la polenta (si no tienes sobrante) la receta tradicional la encuentras en el artículo «anillo de polenta con costillas de cerdo y salchichas.
- 1200 g polenta cocida
- 40 g parmesano
- 50 g mantequilla
- 2 hojas salvia
Herramientas
- 1 Bandeja de horno
- 1 Molde cuadrado
- 1 Fuente de horno
- 1 Sartén
Pasos
Después de haber cocido la polenta, vierte la que te ha sobrado en una fuente o en la bandeja del horno nivelándola a un espesor de 4/5 milímetros y deja que se enfríe bien. Usa un cortador de galletas para cortar cuadraditos o si prefieres discos de 5/6 centímetros aproximadamente. Transfiere los cuadraditos de polenta a una fuente de horno engrasada, superponiéndolos ligeramente. En una sartén, derrite la mantequilla con la salvia. Distribuye la mantequilla sobre la polenta, espolvorea con el parmesano rallado y hornea a 200 °C precalentado durante 10/12 minutos.
Notas
Si tienes una polenta simple y no de trufa como la mía, puedes añadirle queso, para un toque fundente, antes de poner el parmesano: fontina, brie o asiago van muy bien con este plato.
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