La schiacciata crujiente de patatas y calabacines con su base sencillísima de agua y harina es una receta simple y deliciosa. Una especie de tarta rústica, una focaccia fina y sin levadura excelente para servir cortada en cuadraditos para un aperitivo. Lo bueno de esta receta es que puedes variar los ingredientes cada vez manteniendo la base y llevar a la mesa un aperitivo siempre diferente. Hoy preparamos la schiacciata crujiente de patatas y calabacines. ¿Y la próxima vez? Os dejo algunas sugerencias.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 2/4 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g harina tipo 1
- 370 ml agua
- 40 g queso parmesano rallado
- 350 g patatas y calabacines
- 1 cucharadita sal
- 3 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- c.s. orégano
- c.s. ajo en polvo
- c.s. harina de maíz
Herramientas
- 1 Cuenco
- 1 Batidor de mano
- 1 Mandolina
- 1 Bandeja 35 x 25
Pasos
En un cuenco mezclar la harina y el agua utilizando un batidor y teniendo cuidado de que no se formen grumos. Añadir la sal, el ajo en polvo, el orégano y el parmesano y mezclar para amalgamar bien todos los ingredientes.
Lavar los calabacines, secarlos, eliminar los extremos y cortarlos en rodajas finas utilizando una mandolina. Pelar las patatas y cortarlas finas con la mandolina.
Añadir las verduras a la masa y mezclar bien todo.
Verter la mezcla en la bandeja, espolvorear con la harina de maíz y cocinar en horno precalentado a 200 °C durante 35 minutos.
Notas
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