Albóndigas de berenjena de la abuela son fáciles de hacer, yo las amé al primer bocado. Las croquetas de berenjena son perfectas si quieres que tus hijos coman berenjenas porque parecen las clásicas albóndigas de carne. Después de formar las albóndigas con la pulpa de las berenjenas al horno, las freí, pero puedes cocinarlas al horno o también en freidora de aire, están deliciosas y se acabarán en un abrir y cerrar de ojos. Son buenísimas tanto calientes recién hechas como a temperatura ambiente y perfectas como aperitivo, excelentes en un buffet o para acompañar un cóctel. Las albóndigas de berenjena y ricotta son suavísimas por dentro y crujientes por fuera. Si también te encantan las berenjenas como a mí, te recomiendo que eches un vistazo a BERENJENAS RECETAS RÁPIDAS, estoy segura de que encontrarás alguna otra receta para probar. Ahora vamos a ver cómo hacer las albóndigas de berenjena que quedan suavísimas por dentro y crujientes por fuera, y si las pruebas, házmelo saber. Barbara

Te recomiendo probar también:

Dificultad: Fácil
Costo: Económico
Tiempo de preparación: 20 Minutos
Porciones: 4
Métodos de Cocción: Fritura
Cocina: Italiana
Estacionalidad: Todas las estaciones

Ingredientes para preparar las albóndigas de berenjena de la abuela

2 berenjenas
2 dientes ajo
hojas albahaca
c.s. aceite de oliva virgen extra
c.s. sal
c.s. pimienta
1 huevo
100 g ricotta
c.s. perejil
c.s. pan rallado
c.s. aceite de cacahuete

Cómo preparar las albóndigas de berenjena de la abuela

Empezamos a preparar las Albóndigas de berenjena picando finamente el ajo.
la albahaca y algunas hojas de perejil
después viértelo en un bol y añade aceite de oliva virgen, mezcla bien y deja que se impregne de sabor.
Lava las berenjenas, córtalas por la mitad a lo largo y hazles cortes en cuadrícula,
cubre una bandeja con papel de horno y coloca las berenjenas, vierte sobre ellas el aceite y la mezcla de ajo, perejil y albahaca, abriendo los cortes para que el condimento pueda penetrar en ellos.
Rocía con más aceite si es necesario. Cocina en horno estático pre-calentado a 180°C durante 40 minutos
Cuando las berenjenas estén cocidas y la pulpa esté suave, sácalas del horno y deja que se enfríen, puedes cocinarlas el día anterior. Con una cuchara saca la pulpa de las berenjenas,
luego viértela en un bol y aplástala bien con un tenedor.
Añade un huevo,
la ricotta,
y mezcla bien hasta obtener una mezcla homogénea,
Añade perejil picado,
y 100 g de pan rallado, yo
lo agregué en dos veces para que se incorpore bien, debes obtener una mezcla suave pero que mantenga bien la forma.
Toma parte de la mezcla y forma las albóndigas, que pasarás por pan rallado.
Calienta aceite de cacahuete y cuando esté a temperatura fríe las albóndigas, pocas a la vez para no bajar demasiado la temperatura del aceite, de esta manera no absorberán demasiado aceite y estarán secas.
Gira frecuentemente las albóndigas hasta dorarlas. Cuando estén listas, sácalas del aceite y deja reposar sobre papel absorbente.
Añade una pizca de sal y sírvelas calientes o a temperatura ambiente.