Buñuelos con ricotta salados, un delicioso aperitivo que se prepara en pocos minutos. Yo he añadido al interior unos cubitos de panceta ahumada que hacen especiales estos buñuelos con levadura instantánea. Los buñuelos de ricotta salados son también buenos para acompañar embutidos o quesos, son una variante más rápida de las PETTOLE PUGLIESI que, al tener levadura de cerveza, necesitan fermentar antes de ser fritas. Los buñuelos salados con levadura instantánea son buenísimos recién hechos o comidos en el día, por lo que os recomiendo no prepararlos con demasiada antelación. Gracias al uso de levadura instantánea, los buñuelos salados son rápidos y sencillos de hacer. También podéis usar levadura para dulces, pero aseguraos de que no contenga vainillina ni azúcar, ya que algunos tipos y marcas los contienen. También podéis usar cremor tártaro con una pizca de bicarbonato. Ahora vamos a ver cómo hacer los buñuelos salados y si los probáis, hacédmelo saber. Barbara

Aquí tenéis otras recetas deliciosas que os recomiendo probar:

Dificultad: Muy fácil
Costo: Económico
Tiempo de preparación: 15 Minutos
Porciones: 4
Métodos de Cocción: Fritura
Cocina: Italiana
Estacionalidad: Todas las estaciones

Ingredientes para preparar los buñuelos con ricotta salados

250 g ricotta
60 g panceta ahumada
2 huevos
c.s. sal
170 g harina 00
2 cucharaditas levadura instantánea para preparaciones saladas
c.s. aceite de cacahuete

Cómo preparar los buñuelos con ricotta salados

Comenzamos a preparar los buñuelos con ricotta salados, cortad la panceta ahumada en cubitos pequeños.
Verted en el bol la ricotta y trabajadla con el tenedor,
Luego añadid los huevos,
una pizca de sal,
los cubitos de panceta ahumada,
la harina,
y por último la levadura instantánea,
trabajad bien todo con un tenedor para obtener una mezcla homogénea y sin grumos.
Calentad el aceite de cacahuete a una temperatura de unos 170 °C. Si no tenéis un termómetro para comprobar cuando está listo para freír, usad un cucharón de madera, introducid el mango en el aceite y si se forman burbujas a su alrededor, significa que el aceite está listo para ser usado. Con una cucharadita, tomad la masa y vertedla en el aceite caliente, ayudándoos con la otra cucharadita para que se desprenda. Formad más buñuelos, pero no demasiados, de lo contrario no tendréis espacio para darles la vuelta y no se cocinarán de manera homogénea.
Ayudándoos con un tenedor, dadle la vuelta a los buñuelos con frecuencia para que la cocción sea homogénea.
Cuando los buñuelos estén bien dorados, retíralos del aceite y
déjalos reposar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Si lo deseáis, añadid sal y servid los buñuelos.