Cómo preparar las Rosquillas fritas

• Procedamos con la preparación de las Rosquillas fritas, si tienes una amasadora, será seguramente más fácil y rápido prepararlas, de lo contrario no te preocupes, puedes amasar en un bol. Disuelve la levadura con un poco de leche. Trabaja en la amasadora las harinas, el azúcar y la sal. Posteriormente añade la levadura disuelta y la leche y el agua restantes. Amasa todo y por último añade la mantequilla, continúa trabajando la masa hasta que esté bien incorporada. Cubre el bol con film transparente y deja reposar durante 2 o 3 horas, la masa debe duplicar su tamaño.  

• Transfiere la masa a la superficie de trabajo y estírala hasta un grosor de aproximadamente 1 cm y con la ayuda de un cortador de pasta saca los discos y con un cortador más pequeño haz el agujero en el centro. Coloca las rosquillas en papel de horno bien espaciadas y deja reposar durante otra hora, cubiertas o mejor aún en el horno apagado.  

• Después de la fermentación, corta el papel de horno de manera que cada rosquilla tenga su propio papel, esto nos ayudará a ponerlas en el aceite. Ahora vierte el aceite de semillas de cacahuate en una cacerola y llévalo a una temperatura de 170/180 °C, si no tienes un termómetro, haz la prueba con el mango de una cuchara de madera, si se forman burbujas alrededor significa que la temperatura es perfecta para verter la primera rosquilla. Toma el trozo de papel de horno donde está la rosquilla y coloca una a una las rosquillas en el aceite, verás que se despegarán solas del papel, elimina el papel y deja cocinar las rosquillas, no cocines demasiadas juntas. Cuando estén doradas, escúrrelas y déjalas secar en papel absorbente. Pásalas por ambos lados por azúcar granulada para que se cubran bien, sírvelas calientes o a temperatura ambiente.