Pizza en bandeja: lista en 2 horas y 30 minutos!
¿Tienes ganas de una pizza en bandeja exquisita pero no tienes tiempo para la larga fermentación? ¡No te preocupes! Con esta receta sencilla y rápida puedes preparar una pizza deliciosa en solo 2 horas y 30 minutos, sin renunciar al sabor y la crujencia.
¡No necesitas largas esperas: esta pizza es perfecta para quienes tienen poco tiempo!
En esta receta, descubrirás un método ingenioso que te permitirá obtener una pizza fermentada y cocida a la perfección en poco tiempo. ¿El resultado? Una pizza suave y sabrosa, con un borde crujiente e irresistible.
Lista cualquier día de la semana, perfecta para una cena en familia o con amigos.
Ya seas un experto en cocina o un principiante, esta receta es fácil de seguir y garantiza resultados excelentes. No te queda más que ponerte manos a la obra y preparar tu pizza en bandeja hecha en casa, ¡en muy poco tiempo!
¿A qué esperas? ¡Empieza ya!
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas 5 Minutos
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 6
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 500 g harina 0
- 100 g sémola remolienda de trigo duro
- 400 g agua
- 1 vasito aceite de oliva virgen extra (Taza de café)
- 1 cuchara de mesa sal fina
- 1 cucharadita azúcar
- 1 cubo levadura fresca de cerveza
Herramientas
- 1 Cortapizzas
- 1 Amasadora
Pasos
Paso 1
Añado primero toda el agua a temperatura ambiente en el recipiente de la amasadora…
Paso 2
Añado también el aceite de oliva virgen extra..
Paso 3
Añado también la sal y mezclo bien el agua, el aceite y la sal con la cuchara.
Paso 4
Añado la mitad de la harina «0» y la mitad de sémola de trigo duro y pongo en marcha la amasadora a baja velocidad aumentando poco a poco hasta una velocidad media… Trabajo la masa durante unos 7 minutos hasta obtener un bollo blando y pegajoso…
(Si es necesario añade agua).. Algunas harinas absorben más, otras menos…
Paso 5
Desmenuzo la levadura con las manos y la añado directamente a la masa…
Paso 6
Ahora puedo añadir el azúcar… Este último ingrediente, junto con la levadura, es importante ponerlo lejos de la sal, al menos 5 minutos después, tanto si amasamos a mano como con la amasadora. Este es un paso fundamental para tener una buena fermentación y maduración de la masa…
Además porque una mayor cantidad de sal retrasa la fermentación o incluso puede impedirla en algunas preparaciones…
Paso 7
Termino añadiendo toda la harina restante y continúo amasando siempre con la amasadora comenzando desde la velocidad número 1 aumentando gradualmente hasta una velocidad media alrededor del número 7…
Paso 8
Dejo trabajar la amasadora hasta obtener un bollo liso, suave y homogéneo..
Paso 9
Ahora dejando la masa directamente en el recipiente de la amasadora, la cubro con un paño de algodón y la dejo fermentar durante 30 minutos cerrada en el horno con la luz encendida para tener una temperatura constante entre 25 y 28°C.
Paso 10
La masa ha duplicado perfectamente su tamaño y la transfiero a una bandeja de 35×35 con bordes altos previamente engrasada con aceite de oliva virgen extra.
Paso 11
La masa ha quedado perfecta, suave y elástica, por lo que para evitar que se pegue a las manos mientras la extendemos, nos untamos las manos con aceite y cubrimos delicadamente toda la superficie de la bandeja… La dejamos fermentar durante 2 horas siempre en el horno con la luz a una temperatura entre 25 y 28°C…
Después de dos horas, la masa ha duplicado su tamaño también en la bandeja y ha alcanzado los bordes.
Paso 12
Ahora otro paso fundamental es precalentar el horno a 200°C y cocinar la pizza durante 7 minutos tal cual sin añadir nada. (Este paso es un pequeño truco que servirá para evitar que se baje con el peso de los ingredientes y, de lo contrario, se corre el riesgo de romper las burbujas internas que nos garantizan una mayor crujencia).
Paso 13
Después de 7 minutos, podemos sacarla del horno y añadir la salsa de tomate previamente calentada y salada, luego cubrirla al gusto pero sin añadir la mozzarella. Ahora cocinamos durante 13′ a la máxima potencia de 250°C.
Paso 14
Puedo añadir la mozzarella y concluir la cocción durante otros 5 minutos siempre a 250°C.
Paso 15
La pizza en bandeja está lista, perfecta, crujientísima y alta en el punto justo.
Yo la he cubierto con salsa de tomate, orégano, aceitunas verdes, mozzarella y jamón crudo en frío…
¡Buen provecho de parte de Dadcookrock!!!
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Vino para acompañar la pizza en bandeja:
Elegir el vino adecuado para acompañar la pizza en bandeja es fundamental para resaltar los sabores y crear una experiencia gastronómica realmente especial.
Considerando la riqueza y variedad de los ingredientes típicos de la pizza en bandeja, es aconsejable optar por vinos tintos o rosados de cuerpo medio, caracterizados por una buena frescura y taninos suaves.
Aquí algunos maridajes excelentes:
Vino Tinto:
Cesanese del Piglio: Un vino de Lacio de color rojo rubí intenso, con aromas de frutas rojas, especias y regaliz. Su sabor decidido y persistente se casa perfectamente con los sabores intensos de la pizza en bandeja, especialmente si se condimenta con salchicha, champiñones o quesos curados. Frappato di Vittoria: Un vino siciliano de color rojo granate luminoso, con aromas de cerezas, violetas y matorral mediterráneo. Su sabor fresco y mineral se combina idealmente con pizzas con ingredientes a base de verduras, como la pizza con verduras asadas o la pizza con pimientos. Nero d’Avola: Un vino siciliano de color rojo intenso tendente al granate, con aromas de frutas maduras, especias y regaliz. Su sabor con cuerpo y persistente es perfecto para acompañar pizzas con ingredientes sabrosos, como la pizza con carne o la pizza con ‘nduja.
Vino Rosado:
Cerasuolo di Vittoria: Un vino siciliano de color rosa cerasuelo intenso, con aromas de fresas, cítricos y flores de campo. Su sabor fresco y salado se combina perfectamente con pizzas con ingredientes ligeros, como la pizza marinara o la pizza con mozzarella de búfala. Salice Salentino Rosato: Un vino pugliese de color rosa cerasuelo brillante, con aromas de frutos del bosque, rosa y matorral mediterráneo. Su sabor fresco y mineral es ideal para acompañar pizzas con ingredientes a base de pescado, como la pizza con anchoas o la pizza con mariscos. Lambrusco di Sorbara: Un vino emiliano de color rosa rubí vivaz, con aromas de fresas, cerezas y flores de rosa. Su sabor espumoso y salado se casa perfectamente con pizzas ricas y sabrosas, como la pizza con mortadela o la pizza con patatas.
Además de los vinos mencionados, es posible experimentar también con otros vinos tintos o rosados de diversas regiones italianas, eligiendo siempre productos de calidad y teniendo en cuenta los gustos personales y los sabores específicos de la pizza en bandeja que se desea acompañar.
Recuerda: La elección del vino perfecto es un viaje sensorial que emprender con gusto y curiosidad. No temas atreverte y combinar vinos diferentes con tus pizzas favoritas para descubrir siempre nuevas combinaciones sorprendentes!

