Servir la parmigiana de calabacines tradicional es siempre un verdadero placer. Cuando hace su entrada triunfal a la mesa, trae consigo una historia rica de sabores auténticos.
Esta es una deliciosa variante de la clásica parmigiana con berenjenas y hunde sus raíces en los campos italianos, donde los calabacines se recogían frescos del campo y se transformaban en un plato que cuenta la sencillez y la belleza de la cocina casera. Cada familia tiene su versión, transmitida de generación en generación, con secretos celosamente guardados que hacen de cada bocado una experiencia única.
Para crear una parmigiana de calabacines perfecta es fundamental utilizar ingredientes frescos y de calidad. Los calabacines deben ser firmes y de un verde brillante, los tomates jugosos y maduros, la albahaca fresca y aromática, y el queso debe derretirse en la boca, creando un equilibrio de sabores único.
Para servir no solo como segundo plato, sino también como entrante o plato único, es una de esas recetas que merece la pena hacer propia por su extraordinaria bondad. Preparar y disfrutar de esta delicia atemporal significa concederse un momento de puro placer, redescubriendo los sabores auténticos que han hecho célebre la cocina italiana en el mundo.
No te pierdas estas otras apetitosas recetas con calabacines:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
Ingredientes para Parmigiana de Calabacines Tradicional
- 5 Calabacines grandes
- 500 g Pulpa de tomate
- 300 g mozzarella
- 3 Huevos
- 3 cucharadas Aceite de oliva virgen extra
- 1 diente Ajo
- c.s. albahaca
- c.s. queso parmesano rallado
- c.s. Harina
- c.s. aceite de semillas de girasol
- c.s. Sal
Preparación de la Parmigiana de Calabacines
Lava bien los calabacines, córtalos en rodajas y déjalos secar sobre un paño de cocina.
Mientras tanto, prepara la salsa de tomate, friendo el ajo en el aceite bien caliente. Agrega el tomate, una pizca de sal y algunas hojas de albahaca lavadas y secas. Cocina la salsa durante 20 minutos.
Toma las rodajas de calabacín y pásalas primero por la harina, luego por el huevo batido con un poco de sal.
Fríelas poco a poco en una sartén de bordes altos y en aceite caliente.
A medida que las rodajas de calabacín estén fritas, déjalas secar en papel absorbente.
Ahora proceda a montar la parmigiana de calabacines.
Coloca en una fuente para horno los calabacines en capas, poniendo entre cada una la salsa, la mozzarella cortada en rodajas y el queso parmesano. Termina con algunas cucharadas de salsa, parmesano y mozzarella. Procede así hasta agotar los ingredientes.
Hornea a 200°C durante unos 35 minutos.
Sirve tu parmigiana de calabacines caliente y ¡buen provecho!
Sugerencia
Si quieres una versión más ligera, puedes cocinar los calabacines a la parrilla en lugar de freírlos.
Conservación
Puedes conservar la parmigiana de calabacines en el frigorífico durante un máximo de 3-4 días. Antes de servirla, caliéntala en el horno a 160°C durante unos 15 minutos, hasta que esté bien caliente y el queso vuelva a estar fundido.
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FAQ
¿Puedo preparar la parmigiana de calabacines con antelación?
Sí, la parmigiana de calabacines se puede preparar con antelación y guardar en el frigorífico hasta el momento de servir. También puedes ensamblar el plato el día anterior y cocinarlo justo antes de servir.
¿Cuál es el mejor tipo de queso para usar en la parmigiana de calabacines?
El parmesano reggiano y la mozzarella son los quesos más comúnmente utilizados en la parmigiana de calabacines tradicional. El parmesano reggiano aporta un sabor decidido, mientras que la mozzarella proporciona una textura cremosa y fundente.
