El pastel salado de patatas, jamón cocido y provola es mucho más que un simple plato: es un abrazo culinario, capaz de transformar incluso una comida ordinaria en un momento especial. Con su relleno cremoso, fundente y rico en sabores, este rústico es un triunfo de sabor y sencillez.
¿Quién no ha deseado alguna vez un plato que sepa mimar desde el primer bocado? Con este pastel salado, es imposible no enamorarse: el sabor delicado del jamón cocido, el abrazo de las patatas y ese fundir irresistible de la provola son puro confort.
Además, es una de esas recetas que se prestan a mil ocasiones. Es la aliada perfecta para una cena rápida pero sabrosa, un aperitivo delicioso o un almuerzo para llevar al trabajo y calentar en el microondas. Además, gracias a sus ingredientes simples y versátiles, complace a todos.
Su preparación es un momento de pura satisfacción: untar la crema de patatas, estratificar el jamón cocido y la provola, y luego cerrar todo en una cáscara fragante de hojaldre. Y cuando el horno comienza a difundir ese aroma inconfundible… bueno, ¡es imposible resistirse!
Si estás buscando un plato que sea simple de realizar, pero que sea capaz de conquistar a todos, el pastel salado con jamón cocido y patatas es la elección ideal. No requiere largas preparaciones ni técnicas complicadas y el resultado siempre está garantizado.
Sin olvidar que este pastel rústico también es una excelente manera de reducir desperdicios en la cocina. ¿Tienes patatas cocidas sobrantes? ¿Un poco de jamón cocido en el frigorífico? ¿Una provola que espera ser usada? ¡Aquí tienes la solución!
Un consejo: Sírvelo caliente, cuando el aroma invita a todos a la mesa y la provola se funde en cada porción, o disfrútalo al día siguiente, tibio o frío, para descubrir que su bondad no conoce límites. Es el plato que te hace sonreír, cada vez.
Prueba también estos otros apetitosos pasteles rústicos:
- Pastel salado con patatas, mortadela y provola: el rústico sabroso y fundente que conquista a todos.
- Pastel salado con espinacas y provola: el versátil pastel rústico con un relleno sabroso y fundente.
- Pastel salado con alcachofas, scamorza y jamón cocido: el rústico delicioso en forma y sabor. Receta simple y apetecible.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 6Piezas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Energía 477,07 (Kcal)
- Carbohidratos 40,15 (g) de los cuales azúcares 1,45 (g)
- Proteínas 14,29 (g)
- Grasa 29,19 (g) de los cuales saturados 8,81 (g)de los cuales insaturados 18,88 (g)
- Fibras 3,26 (g)
- Sodio 1.193,84 (mg)
Valores indicativos para una ración de 170 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes para Pastel salado de patatas, jamón cocido y provola
- 1 rollo hojaldre
- 5 patatas
- 200 g provola
- 3 pizcas nuez moscada
- 1 cucharada aceite de oliva
- 1 cucharada perejil seco
- 6 pizcas sal
Preparación del Pastel salado con patatas, jamón cocido y provola
Cuece 3 patatas en una olla con abundante agua fría y salada, durante 20 minutos.
Luego, pásalas por el pasapuré y recoge el puré en un bol. Condimenta con 3 pizcas de sal y 2 pizcas de nuez moscada. Mezcla bien el compuesto con un cucharón.
Corta la provola por la mitad. Una parte córtala en dados, la otra en rodajas.
Extiende el rectángulo de hojaldre sobre una bandeja, forrada con papel de horno, y agujerea la superficie con los dientes de un tenedor.
Luego, distribuye la mitad de la crema de patatas sobre el hojaldre, dejando los bordes libres por 2-3 cm y nivelando bien con una espátula.
A continuación, añade las lonchas de jamón cocido y las de provola. Cubre con el puré de patatas restante.
Ahora dobla los bordes del hojaldre, primero sobre sí mismos y luego hacia dentro, y termina con los dientes del tenedor.
Espolvorea la superficie del pastel salado con la provola en dados, el perejil seco y un chorro de aceite.
Luego, pasa las otras 2 patatas cocidas y condimenta su puré con una pizca de sal y de nuez moscada. Transfiérelo a una manga pastelera y decora con él el pastel rústico, haciendo pequeños copos.
Finalmente, unta los bordes del pastel con un poco de aceite y cuece en horno precalentado a 200°, durante 25 minutos.
Sirve el hojaldre tanto caliente como tibio.
Conservación
El pastel salado con patatas, jamón cocido y provola se conserva en la nevera, cubierto con una hoja de aluminio o en un recipiente adecuado, durante 2-3 días. Al momento de disfrutarlo, caliéntalo en el horno a 160° durante unos diez minutos.
Recetas relacionadas
Colección de Pasteles Salados: recetas rústicas fáciles y sabrosas
FAQ
¿Puedo preparar el pastel salado de patatas, jamón cocido y provola con anticipación?
¡Sí, puedes prepararlo con anticipación! Es perfecto para disfrutar tanto caliente como frío. Prepáralo la noche anterior, consérvalo en el frigorífico y caliéntalo ligeramente en el horno antes de servirlo para devolverle el crujiente al hojaldre.
¿Qué tipo de patatas es mejor para esta receta?
Para un relleno suave y cremoso, te recomiendo usar patatas harinosas, como las patatas de carne blanca. Si prefieres una consistencia más firme, las patatas de carne amarilla son una excelente alternativa.
¿Puedo sustituir la provola por otro queso?
Puedes sustituir la provola por mozzarella, scamorza, fontina o cualquier queso fundente que prefieras. Para un toque más intenso, prueba con un queso ahumado.
¿Puedo usar patatas ya cocidas para acelerar la receta?
Sí, puedes utilizar patatas cocidas o cocidas al vapor previamente. Esto permitirá ahorrar tiempo, sin comprometer el resultado final.