Panna cotta vegetal con salsa de fresas, un postre de cuchara sin lactosa y sin gluten.
En los días calurosos de primavera y verano un postre de cuchara fresco y delicioso es justo lo que necesitas, ¡y este es perfecto!
He adornado la panna cotta con salsa de fresas frescas, pero también puedes optar por una ganache de chocolate y quizás trocitos de avellana o si quieres hacerlo aún más rápido, un simple topping ya listo para usar.
Si nunca has preparado panna cotta en casa, verás que además de ser muy sencilla, es súper rápida. Además, al hacer porciones individuales es muy práctica en caso de invitados.
¿Vamos a ver cómo prepararla?
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 4 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 3
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano, Primavera
Ingredientes
- 300 ml nata vegetal azucarada para montar
- 100 ml leche vegetal (recomiendo de almendra pero puedes usar la que prefieras)
- 4 g gelatina en hojas
- 1 cucharadita extracto de vainilla
- 200 g fresas
- 1 cucharada zumo de limón
- 1 cucharada azúcar
Herramientas
- Cazo
- 3 Cuencos
- Batidora de inmersión
Pasos
Primero pon la gelatina a remojar en agua fría durante unos diez minutos.
En un cazo calienta la nata y la leche con la vainilla, cuando esté a punto de hervir, añade la gelatina rehidratada y mezcla bien para disolverla completamente.
Apaga el fuego y divide la nata en los cuencos, deja que se temple y luego mételos en el frigorífico. Deberán reposar durante unas 4 horas para solidificar perfectamente.Ahora prepara las fresas. Lávalas y córtalas en trocitos, añade limón y azúcar y tritúralas con una batidora de inmersión. Guarda la salsa de fresas en el frigorífico y viértela sobre la panna cotta una vez solidificada.
Si prefieres una salsa más densa y consistente puedes añadir 1 gr de gelatina. Como siempre, rehidrata la gelatina en agua unos diez minutos, disuélvela al fuego con dos cucharadas de salsa de fresas y luego añádela al resto, mezclando bien.
Al gusto, decora con fresas frescas y hojitas de menta.
Conserva en el frigorífico hasta el momento de consumirlas.
La panna cotta se conserva en el frigorífico durante unos 3 días, siempre recomiendo mantenerla cubierta.
