Albóndigas de pavo al pesto, cocidas al horno, un segundo plato fácil y rápido, muy sabroso.
Obviamente no añadí sal en la mezcla porque ya estaban sabrosas así, si lo prefieres puedes hacerlo sin problema.
Para realizar esta receta añadí el clásico pesto genovés (ya preparado, ¡mea culpa!), dos cucharadas serán más que suficientes para darle su inconfundible color y sabor.
Dado que el pesto es el protagonista indiscutible de esta receta tan apetecible, os dejo algún pequeño apunte que os ayudará a conocerlo mejor.
El pesto es un condimento ligur a base de albahaca al que se añaden Parmigiano Reggiano, Pecorino, piñones y aceite de oliva virgen extra junto con sal y ajo.
El pesto se trabaja con el mortero (preferiblemente de mármol). Esto para no oxidar las hojas de albahaca y mantener su color verde brillante.
Pequeños detalles fundamentales que hacen que la receta del pesto sea inimitable si se hace con otros utensilios e ingredientes.
Siendo yo de Abruzos, prefiero confiar en los productos artesanales, no sería capaz de reproducir un pesto original, por eso aquí encuentras el ya preparado, lo más artesanal posible.
Y aquí abajo os dejo algunas recetas con el pesto como protagonista.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 15 albóndigas aproximadamente
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 270 g carne picada de pavo
- 60 g pesto
- 120 pan rallado (de grano grueso)
- 30 g Grana Padano rallado
- 1 huevo
Herramientas
- 1 Bol
- 1 Cuchara
- 1 Bandeja de horno
- Papel de horno
Pasos
Para hacer las albóndigas de pavo al pesto, en un bol pon la carne picada de pavo y trabájala rápidamente con las manos.
Añade las dos cucharadas de pesto, el queso rallado y la mitad del pan rallado.
Trabaja los ingredientes.
Añade el huevo, el pan rallado restante y mezcla los ingredientes entre sí.
Forma las albóndigas.
Coloca las albóndigas en una bandeja de horno cubierta con papel de horno y hornea en horno caliente con ventilación a 180º durante 25 minutos.
No hace falta añadir más grasas porque bastarán el aceite y la sal del pesto.
