Alcachofas a la sartén, un acompañamiento aromático, fácil y sabroso, perfecto para preparar con antelación e ideal para acompañar muchos segundos platos diferentes.
Esta vez he elegido, para mi receta, unas alcachofas pequeñas y tiernísimas que recuerdan a las «mammole».
Entre las variedades de alcachofas, las «mammole» son las que prefiero, porque son fáciles de limpiar, no tienen las llamadas espinas y también encuentro las hojas mucho más tiernas.
En esta receta también aprovecho los tallos y, para completarla, se necesitará un poco de caldo vegetal. También será válido un poco de cubito de caldo disuelto en agua muy caliente. En este caso, yo uso el que hago en casa, que preparo a menudo con verduras fresquísimas y pongo en el congelador, pero vosotros podéis usar lo que prefiráis e incluso hacer un pequeño caldo al momento con apio, zanahoria y cebolla.
La receta de mi cubito de caldo casero la encontráis aquí abajo, si deseáis hacerlo.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 15 Minutos
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 2 personas
- Métodos de Cocción: Hornillo
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Invierno, Primavera
Ingredientes
- 300 g alcachofas (de tamaño medio)
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 diente ajo
- 200 ml caldo vegetal
- al gusto perejil
Herramientas
- 1 Cuchillo
- 1 Cuenco
- 1 Tabla de cortar
- 1 Sartén
- 1 Tapa
- 1 Espátula
Pasos
Para preparar las Alcachofas a la sartén, primero preparamos el caldo.
Yo he elegido medio cucharadita de cubito de caldo casero en un cuenco de agua hirviendo.
Vosotros podéis prepararlo como prefiráis.
Limpiamos las alcachofas separando el tallo de la parte superior.
Eliminamos la parte más oscura del tallo y quitamos la parte externa con un cuchillito.
Luego lo dividimos en trozos.
Repetimos para todos los tallos y los ponemos en un cuenco grande con agua fría.
Ahora nos dedicamos a las alcachofas.
Quitamos las hojas externas más duras y limpiamos la parte del tallo que ha quedado unida, también quitamos parte de la parte superior de la alcachofa.
Dividimos las alcachofas por la mitad. eliminamos la posible pelusa en el centro con un cuchillito y luego cortamos las alcachofas en rodajas.
Colocamos también las alcachofas en el cuenco con agua y limón.
Dejamos reposar unos quince minutos.
Mientras tanto, limpiamos el ajo y lo cortamos.
En una sartén, lo doramos con el aceite durante un minuto y añadimos las alcachofas escurridas.
Mezclamos durante un minuto, añadimos el caldo y cubrimos con una tapa.
Cocinamos durante 10 minutos, quitamos la tapa y continuamos la cocción durante otros 5 minutos.
Si es necesario, ajustamos de sal y, si os gusta, también se puede añadir pimienta.
Apagamos el fuego, adornamos con perejil fresco picado y llevamos a la mesa.
Las alcachofas a la sartén son ideales para acompañar muchos segundos platos, sobre todo a base de carne, secos, como empanados o rollitos.
