Crema ganache de chocolate blanco, con nata, sin mantequilla, muy fácil de hacer, perfecta para decorar postres, excelente para rellenar bombones.
La receta se prepara en pocos minutos, solo necesita un tiempo de reposo bastante largo en el frigorífico, de dos a ocho horas antes de usarla, por lo que se puede preparar con antelación.
La crema ganache, también llamada crema parisina, es una preparación pastelera a base de nata fresca, chocolate y mantequilla, en la mayoría de los casos.
Para preparar la crema es necesario llevar la nata a ebullición y luego unirla al chocolate, preferiblemente troceado.
Luego hay que mezclar bien hasta que se derrita el chocolate y dejar enfriar.
Mi consejo es transferir la crema en un bol justo después de prepararla, mezclarla de vez en cuando hasta que se enfríe a temperatura ambiente y luego cubrirla con film y ponerla en el frigorífico a reposar.
Aquí abajo os dejo mi crema ganache de chocolate negro.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Métodos de Cocción: Ebullición
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las temporadas
Ingredientes
- 200 ml nata fresca para montar
- 200 g chocolate blanco
Utensilios
- 1 Cazo
- 1 Batidor manual
- 1 Bol
- 1 Film transparente
- 1 Cuchillo
- 1 Tabla de cortar
Pasos
Para realizar la Crema ganache de chocolate blanco, lo primero es trocear el chocolate blanco groseramente con un cuchillo o a mano.
Mientras tanto, lleva la nata a ebullición a fuego muy bajo.
Añade el chocolate de una vez y mezcla inmediatamente.
Mezcla rápidamente con el batidor manual hasta que el chocolate se derrita bien.
Transfiere la mezcla a un bol y deja enfriar a temperatura ambiente, mezclando de vez en cuando.
Cubre con film y deja reposar en el frigorífico durante un tiempo que varía entre dos y ocho horas antes de usarla.
Cuanto más repose, más densa se volverá la crema.
Dependiendo de su uso, puedes variar el tiempo de reposo.
Conservación
La Crema ganache de chocolate blanco se conserva en el frigorífico entre 24 y 48 horas después de la cocción.
