Hoy preparamos la receta de la tarta salada con masa de hojaldre, ricotta, huevos y cebollino, lo que significa sumergirse en un mundo de sabores delicados y envolventes, donde la ligereza del hojaldre se fusiona armoniosamente con la cremosidad de la ricotta, la elegancia de los huevos y la frescura del cebollino. Esta preparación es una auténtica delicia para el paladar, una creación culinaria que encanta por su simplicidad y al mismo tiempo por la complejidad de aromas que logra ofrecer.
El hojaldre, crujiente y dorado, constituye la base perfecta para esta tarta salada, proporcionando un contraste agradable con la suavidad de los otros ingredientes. La ricotta, con su consistencia aterciopelada, añade una nota de cremosidad y un sabor delicado que se amalgama con el conjunto. Los huevos, elemento fundamental de esta preparación, contribuyen a conferir una consistencia esponjosa y a hacer que el relleno se infle ligeramente y se dore durante la cocción.
El cebollino, con su aroma fresco y su sabor ligeramente picante, desempeña un papel clave, aportando un toque de vivacidad y ayudando a equilibrar la dulzura de la ricotta. La combinación de estos ingredientes crea un equilibrio gustativo único, perfecto para satisfacer a los paladares más refinados y a los amantes de la cocina simple y elegante. A continuación, os dejo otras recetas deliciosas.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Hornillo, Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la tarta salada con ricotta y cebollino
- 1 masa de hojaldre (redonda)
- 400 g cebollinos frescos
- 7 huevos (medianos)
- 300 g ricotta de vaca
- c.s. sal
- c.s. pimienta
- c.s. aceite de oliva virgen extra
Herramientas para la tarta salada con ricotta y cebollino
- 1 Tabla de cortar
- 1 Cuchillo
- 1 Sartén
- 1 Bol
- 1 Fuente de horno
Pasos
Para preparar la tarta salada con ricotta y cebollino, comienza cortando el cebollino en rodajas.
Transfiérelo a una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra,
deja dorar durante 10 minutos y transfiere a un bol grande.
Añade la ricotta,
los huevos y
mezcla todo.
Ajusta de sal y pimienta y mezcla de nuevo.
Ahora desenrolla la masa de hojaldre sobre una fuente de horno de cerámica de al menos 5 cm de altura y revestida con papel de horno. Pincha el fondo del hojaldre con los dientes de un tenedor y vierte la mezcla.
Hornea en horno ventilado precalentado a 200º durante 20 minutos en la rejilla media y otros 10 minutos en la inferior. Desmolda la tarta salada cuando se haya enfriado y sirve.