Salchicha con cebollas con aromas en sartén, cocinadas así son realmente una bomba, quedan jugosas y tiernas un segundo plato original y perfecto si nos gustan los sabores fuertes.

Y no es solo sabroso y sabroso: ¡también es facilísimo y rápido de preparar! En resumen, el plato perfecto de último minuto cuando necesitamos organizar un almuerzo o una cena rápida.

Para llevarlo a la mesa necesitamos pocos ingredientes y poco tiempo, lo que hace la receta muy versátil y adecuada también para la cocina entre semana.

Segundo y guarnición en un solo plato, suave y envolvente, pero bien dorado y sabroso: esto es lo que llevarás a la mesa si decides probar mi receta deliciosa.

Las salchichas gustan a todos, si la única duda que te asalta son las cebollas te doy un consejo: prueba al menos una vez este plato y descubrirás una bomba de bondad que te sorprenderá!

Un plato que no tiene temporada porque siempre está buenísimo! Ya sea que quieras comerlo como segundo plato o para rellenar un bocadillo, la salchicha con cebollas es una verdadera exquisitez! 

Las cebollas doradas, con su sabor dulce y delicado, se combinan perfectamente con el vino y enriquecen de sabor y color este plato.

Esta es una receta que se presta a muchas variantes: en lugar de las salchichas de cerdo podemos usar por ejemplo las de pavo o de pollo y podemos hacer trocitos. También la elección de las cebollas es absolutamente libre: si no nos gustan las doradas, van muy bien también las rojas.

Como salchicha he usado la luganega, es una salchicha fresca, larga y delgada cortada en trocitos de aproximadamente 10 cm pero también va muy bien la clásica salchicha.

¡Vamos, vamos a la cocina y háganme saber si les gustó!