Debo admitir que a veces las recetas que propongo en el blog se inspiran en charlas telefónicas con amigas o familiares. Estas patatas rellenas al horno, por ejemplo, nacen de una de esas largas y fructíferas conversaciones, ¡y debo decir que, una vez en la cocina, el resultado ha sido realmente sorprendente! Obviamente, propongo mi versión personal, pero nada impide, si se desea, hacer alguna variante según los gustos personales o los ingredientes disponibles. De hecho, son muy versátiles y se prestan a mil variantes y rellenos diferentes. Para mí también es el plato perfecto para vaciar la nevera, ya que tenía prisa por consumir jamón serrano. Sin embargo, podéis proponerlo en la mesa como plato único para la cena o el brunch, o como aperitivo o finger food apetitoso dentro de un buffet. ¡De cualquier manera que elijáis proponerlo, siempre será un éxito!
¿Amáis las patatas de todas las maneras posibles e imaginables? Probad también estas ideas, todas vistosas y deliciosas:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Tiempo de cocción: 25 Minutos
- Porciones: 4
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
⚠ EN ESTA RECETA HAY UNO O MÁS ENLACES DE AFILIACIÓN. Los productos que recomiendo son los mismos que uso en mis recetas; comprarlos a través de mi blog contribuye a apoyarme a mí y a mi trabajo, ¡mientras que para vosotros no tendrá ningún costo adicional!
- 4 patatas (medianas, preferiblemente del mismo tamaño)
- 120 g provola (yo silana)
- 80 g jamón crudo (o cocido)
- 1 huevo
- 50 g Parmigiano Reggiano DOP (rallado + c.s.)
- c.s. pan rallado
- 1 ramito perejil picado
- c.s. nuez moscada
- c.s. ajo en polvo
- 3 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- c.s. sal
- c.s. pimienta mixta en grano
Herramientas
- 1 Cacerola
- 1 Cuchillo
- 1 Vaciador
- 1 Bandeja
- 1 Tenedor
- 1 Bol
- 1 Bandeja de horno
- 1 Papel de horno
Preparación
Lavad muy bien las patatas dejando la piel intacta. Colocadlas en una cacerola con agua salada y cocedlas durante 20-25′ a partir del hervor. Escurridlas y dejadlas enfriar completamente (fig. 1).
Con un cuchillo cortadlas por la mitad a lo largo (fig. 2).
Con la ayuda de un vaciador, extraed buena parte de la pulpa, teniendo cuidado de no romper los bordes o el fondo de las patatas (fig. 3).
Deben tener un pequeño borde para sostener el relleno* (fig. 4).
Colocad las patatas vaciadas en una bandeja para que se enfríen completamente (fig. 5).
Mientras tanto, trabajad la pulpa de las patatas en un bol grande y aplastadla con los dientes de un tenedor. Añadid el huevo, la pimienta molida al gusto y el ajo en polvo (fig. 6).
Añadid el perejil picado finamente y ajustad de sal (fig. 7).
Incorporad también la nuez moscada y el parmigiano rallado (fig. 8).
Completad añadiendo la provola cortada en daditos y el jamón en trocitos, luego mezclad hasta amalgamar bien todos los ingredientes (fig. 9).
Rellenad con esta mezcla las patatas, luego trasladadlas a una bandeja forrada con papel de horno (fig. 10).
Rociad con un chorro de aceite y espolvoread con más parmigiano rallado al gusto y pan rallado por encima (fig. 11).
Coced las patatas en horno precalentado a 180°C durante 20′, luego activad la función grill y continuad la cocción durante otros 5′ o hasta que el queso se haya derretido y se haya formado una ligera costra en la superficie (fig. 12).
Sacad del horno y servid inmediatamente las patatas rellenas aún calientes con un hilo de aceite en crudo por encima.
Y voilà… ¡las patatas rellenas al horno están listas para ser disfrutadas!
¡Buen Provecho de La Cocina de FeFé!
Conservación
👉Las patatas rellenas al horno se conservan en la nevera dentro de recipientes adecuados para refrigeración y con cierre hermético hasta un máximo de 3 días.
Consejos, notas, variaciones y sugerencias
🟣* Para vaciar la pulpa de las patatas, recomiendo proceder de esta manera: 1) incidir con la punta de un cuchillo el borde de las patatas, calculando aprox. 1 cm al menos; 2) empezar a vaciar la pulpa en el centro con el vaciador y perfeccionar el borde con el mismo cuchillo para evitar romperlo.
🟣Para quienes aman el pescado, podéis sustituir el jamón cocido o crudo por la misma cantidad de salmón ahumado o anchoas en aceite, que quedan estupendas; también se puede variar la elección del queso con otra tipología de pasta hilada o, si preferís, con cubitos de mozzarella, siempre que sea la específica para pizza o mozzarella bien escurrida de su suero.

