¡Quién no ama las flores de calabacín, que levante la mano! Y dado el período estacional, se ven muchas en los mostradores de frutas y verduras. ¡Son tan bonitas e invitantes que me llevan a comprarlas en cantidades industriales! Su preparación ideal sería fritas en tempura, pero su versión light al horno, a menudo rellenas de ricotta, es igualmente válida. Pero cuando te cansas de prepararlas siempre de la misma manera, aquí tienes una idea deliciosa, rápida y facilísima para aprovecharlas al máximo. Este año he preparado varias reservas de pesto que podéis congelar cómodamente y sacar del congelador cuando lo necesitéis. Tiene un sabor realmente especial e inusual, y su cremosidad os conquistará. Como todos los tipos de pesto, este también es bastante versátil. De hecho, será perfecto no solo para sazonar primeros platos y acompañar segundos de carne blanca y roja, sino que también podréis untarlo en tostas, bruschettas y todo lo que vuestra imaginación os sugiera.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
Ingredientes:
- 100 g flores de calabacín
- 40 g almendras
- 50 g parmigiano Reggiano DOP (rallado)
- 50 ml aceite de oliva virgen extra
- 3 anchoas en aceite
- 10 hojas albahaca
- 1 pizca sal
Preparación:
Lavad sin romperlas las flores de calabacín bajo un chorro suave de agua corriente, extraed las protuberancias que se encuentran en la base con un cuchillo pequeño o simplemente con las manos. Este paso es importante para asegurar que las flores estén listas para la preparación.
Extraed también muy delicadamente los estambres internos.
Hasta eliminarlos totalmente.
Escaldad las flores entonces en agua hirviendo sin sal por 1′.
Escurridlas y trasladadlas a un mixer.
Añadid las hojas de albahaca y las anchoitas escurridas de su aceite de conservación.
Triturar hasta obtener una mezcla aún bastante gruesa, luego añadid también las almendras.
Ajustad de sal, pero poco porque las anchoas tenderán a dar bastante sabor a vuestra mezcla. Añadid el parmigiano rallado y la mitad del aceite en hilo.
Continuad triturando a intervalos hasta obtener una consistencia cremosa.
Verted el resto del aceite y triturad una última vez.
Transferid la mezcla obtenida en un recipiente adecuado y servidla rociando con un otro chorrito de aceite y algunas hojas de albahaca.
Y voilà… vuestro pesto de flores de calabacín está listo para ser disfrutado!
¡Buen Provecho desde La Cocina de FeFè!
Podréis conservarlo en la nevera cubierto con film transparente por 2-3 días o congelarlo por 3 meses.

