¿Cuántas veces hemos preparado un suave y perfumado pastel de manzana? Un clásico inmortal para el desayuno de nuestros niños o para la merienda de la tarde. Un clásico, quizás el único e inimitable, entre los muchos dulces que huelen a hogar. Sí, porque creo que ningún otro pastel como el de manzana ha sido replicado tantas veces. Y la razón principal es que ningún otro dulce logra encarnar ese concepto de familia, genuinidad y hogar tan profundamente reconfortante como este. ¡Tanto es así que del pastel de manzana existen ya las versiones más variadas, todas deliciosas como el original, teniendo siempre la manzana como ingrediente principal, pero con añadidos que sabrán satisfacer incluso a los paladares más exigentes y golosos! Mi versión, la verdad, no se desvía mucho de la antigua receta de mi familia, además superprobada, que ha permanecido intacta en su esencia de generación en generación. ¡Tuve que llegar yo para cambiarla un poco, aunque os juro, realmente un mínimo! En esencia, los ingredientes son los mismos, solo elegí sustituir la leche con jugo de naranja y el jarabe de agave con una parte de azúcar. Finalmente, ¡canela como si no hubiera un mañana! ¡Una delicia para probar!
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 25 Minutos
- Porciones: molde de Ø 24
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
- 2 manzanas Golden
- 270 g harina 00
- 100 g mantequilla
- 2 huevos
- 80 g azúcar moreno (+ 1 cucharadita)
- 40 ml jarabe de agave (+ 1 cucharadita)
- 40 g fécula de patata
- 3 cucharadas vermouth dulce
- 1 naranja (el jugo)
- 1 cáscara de naranja (no tratada)
- 1 sobrecito levadura en polvo para pasteles
- 2 cucharaditas canela en polvo
- 1 pizca sal
Herramientas
- 1 Bol
- 1 Cuchillo
- Batidora eléctrica
- 2 Tazones
- 1 Exprimidor de cítricos
- 1 Colador
- 1 Espátula
Preparación
Lava y pela las manzanas. Quítales el corazón y las semillas internas, luego corta la primera en rodajas finas para la decoración final y la segunda en cubitos para agregar a la masa. Mantenlas en 2 tazones separados con la misma solución de agua, vermut, naranja rallada y canela. Mientras tanto, en un bol grande, bate los huevos, la mantequilla derretida al baño maría, el azúcar y el jarabe de arce con la ayuda de la batidora eléctrica (fig. 1).
Trabaja hasta obtener una mezcla clara y espumosa (fig. 2).
Tamiza la harina y la fécula y agrégalas poco a poco continuando a trabajar con la batidora eléctrica (fig. 3).
Alterna con el jugo de naranja filtrado (fig. 4).
Agrega la levadura tamizada y una pizca de sal. Luego exprime los cubitos de manzana y agrégalos a la masa, mezclando no demasiado con una espátula (fig. 5).
Vierte la mezcla en un molde previamente enmantecado y enharinado y dispone en la superficie las rodajas de manzana en círculo, dejando un centímetro del borde (fig. 6).
Decora la superficie con 1 cucharadita de azúcar y 1 de jarabe de arce antes de hornear (fig. 7).
Hornea en horno precalentado a 180°C durante 40′. Hará fe la prueba del palillo. Apaga, deja enfriar a temperatura ambiente, luego desmolda y sirve con azúcar glas a gusto.
Y voilà…¡tu pastel de manzana con naranja y jarabe de arce está listo para ser disfrutado!
¡Buen provecho desde la cocina de Fefè!
