La pasta y garbanzos es uno de los platos más amados de la tradición italiana, símbolo de sencillez. Preparada con pocos ingredientes genuinos — garbanzos, pasta, ajo, romero y aceite de oliva virgen extra — encierra en cada cuchara todo el sabor de la cocina rústica y campesina. Es un plato que calienta el corazón, nutritivo y reconfortante, perfecto en los días fríos pero bueno en cualquier estación. Cada familia tiene su versión, más caldosa o más densa, pero el resultado es siempre el mismo: un plato que huele a recuerdos y tradición.
Cada plato cuenta una historia… y hay muchas más por descubrir:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 1 Día
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4Personas
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 280 g pasta variada
- 200 g garbanzos secos
- 200 ml puré de tomate
- 1/4 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 tallo apio
- 1 ramita romero
- c.s. sal
- c.s. aceite de oliva virgen extra
- 1.5 l agua
- 1 diente ajo
Pasos
Para preparar la pasta y garbanzos, enjuaga bien los garbanzos, elimina los dañados o oscuros y ponlos a remojo en un cuenco grande con abundante agua fría durante al menos 12 horas (o más, si es necesario).
Transcurrido el tiempo de remojo, enjuaga nuevamente los garbanzos y transfiérelos a una olla. Añade aproximadamente 1,5 litros de agua, el diente de ajo, la ramita de romero y lleva a ebullición. Una vez alcanzado el hervor, baja el fuego al mínimo, tapa con una tapa y deja cocer durante una hora. Añade la sal solo al final de la cocción, para evitar que los garbanzos se endurezcan.
Mientras tanto, lava la zanahoria, pélala y píquela finamente. Haz lo mismo con la cebolla, después de quitarle la piel, y con el tallo de apio, bien lavado y sin hebras, y pícalos también.
Pon una olla grande al fuego y vierte 3-4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Añade el picadillo de cebolla, apio y zanahoria, y deja sofreír a fuego lento hasta que estén ligeramente dorados. En este punto, añade el puré de tomate, una pizca generosa de sal, cubre con una tapa y deja cocinar durante unos 10-15 minutos.
Cuando los garbanzos estén cocidos, escúrrelos, reservando su agua de cocción. Vierte la mitad de esta agua en la olla donde está cocinándose el puré de tomate, lleva a ebullición y añade la pasta. Si durante la cocción el líquido se seca demasiado, añade un cucharón de agua de cocción de los garbanzos. A medio cocer la pasta, añade los garbanzos escurridos previamente.
Tu pasta y garbanzos está lista: sencilla, aromática y llena de sabor. ¡Buen provecho!
Consejos
Si no tienes garbanzos secos disponibles, también sirven los de bote precocidos. En este caso, al no disponer del agua de los garbanzos cocidos, puedes añadir al puré de tomate un poco de agua o caldo vegetal para cocinar la pasta.
