Carpaccio de ternera parmesano rúcula y piñones, un segundo plato o un entrante realmente sencillísimo de preparar. Fresco y rápido es ideal para comer durante los períodos más calurosos del año y no solo. Dado que se trata de carne cruda, os recomiendo comprar carne segura, preferiblemente proveniente de granjas extensivas o ecológicas. Una vez preparada la receta, sin embargo, debe ser consumida en pocas horas. Si os sobra, podéis tranquilamente ponerla en el frigorífico dentro de un recipiente hermético. Después, salteadla en la sartén, añadiendo solo un poco más de aceite de oliva virgen extra. Puedo aseguraros que incluso cocida será un plato realmente delicioso. Para algunos será natural añadir el zumo de limón, porque erróneamente se piensa que puede ser una especie de cocción, pero no es así. El resultado es solo cambiar el sabor de la carne. Yo prefiero rallar simplemente la cáscara de un limón encima, para darle al plato un sabor y un aroma lleno de frescura.
Si os gustan los platos frescos, ideales para el verano, entonces no os perdáis las próximas recetas:
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 600 g lonchas de ternera
- 100 g rúcula
- 100 g parmesano
- 80 g aceite de oliva virgen extra
- 1 cáscara/zumo de limón
- c.s. sal y pimienta
Herramientas
- 1 Bandeja
- 1 Papel absorbente
- 1 Film transparente
Preparación
Primero, sacamos la carne del frigorífico y la dejamos a temperatura ambiente durante media hora. Mientras tanto, limpiamos la rúcula, la lavamos cuidadosamente para eliminar cualquier residuo de tierra y la secamos bien. Secamos la carne con papel absorbente para quitar toda la humedad. Colocamos la rúcula en un plato de servir y también ponemos la carne encima.
Condimentamos la carne con aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta recién molida y parmesano rallado en trozos grandes.
Añadimos los piñones y una ralladura de cáscara de limón, uno entero y lo ponemos en el frigorífico durante una hora para que tome sabor, pero primero lo cubrimos con film transparente.
Servimos nuestro Carpaccio de ternera parmesano rúcula y piñones, frío, recién salido del frigorífico y lo disfrutamos todo.
Consejos y conservación
Recomiendo conservar el Carpaccio de ternera parmesano rúcula y piñones solo por pocas horas, así que comedlo rápidamente.
En caso de que sobre, ponedlo dentro de un recipiente hermético de vidrio o cerámica.
En este punto, comedlo solo cocido y de esta forma también podéis pensar en congelarlo.
Descongelad siempre cualquier alimento en el frigorífico.

