Tostadas con col rizada y panceta crujiente, ¿aperitivo o plato único? Este es realmente un gran dilema, porque una tostada lleva a otra, de lo buenas que están. Si decides por la primera idea, te aconsejo tostar rebanadas de pan de pequeño tamaño, de lo contrario tú o tus invitados acabarán por no comer otra cosa. Habitualmente no pongo sal a la col rizada, porque la sal contenida en la panceta logra dar el sabor adecuado a toda la receta. Para quienes aman los sabores más intensos, hagan estofar la col rizada directamente en la sartén, cruda, sin pasar por la ebullición. Solo añade un poco de agua.
Si te gustan los crostini, entonces no te pierdas las próximas recetas:
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4 tostadas
- Métodos de Cocción: Estufa
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
- 4 rebanadas pan integral
- 6 hojas col rizada
- 10 rebanadas finas de panceta
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 diente ajo
- c.s. guindilla
Herramientas
- 1 Sartén antiadherente
- 1 Bandeja
- 1 Papel de horno
- 1 Papel absorbente
- 1 Tabla de cortar
- 1 Cuchillo
Preparación
Primero, tostemos las rebanadas de pan en el horno a 200°C., durante unos 5/7 minutos. Con un cuchillo afilado quitemos las hojas más exteriores de la col rizada, las que deberían desecharse. Dividámoslas a la mitad y eliminemos la parte central, porque quedaría demasiado dura.
Lavémoslas cuidadosamente, sequémoslas y córtalas en tiras bastante finas. Sumérgelas luego en agua hirviendo y déjalas cocinar durante unos 10 minutos.
Coloquemos en una sartén antiadherente ajo, aceite de oliva virgen extra, guindilla y dejemos dorar por unos segundos, antes de volcar la col rizada hervida. Para un sabor más marcado, podemos poner a cocinar en la sartén la col rizada, sin hervirla antes. En este paso no añadimos sal, porque el sabor fuerte de la panceta será suficiente. En cualquier caso, siempre podremos añadirla al final. Retiremos la col rizada y en la misma sartén, pongamos a dorar la panceta. Tan pronto como empiece a cambiar de color, quitémosla y déjala secar sobre papel absorbente. Poco a poco se volverá muy crujiente.
Ahora que todos los ingredientes están listos, podemos ensamblar las tostadas. Coloquemos en un plato para servir o en una tabla de madera las rebanadas de pan y distribuyamos encima la col rizada pasada por la sartén. Finalmente, añadamos las rebanadas de panceta, desmenuzadas con las manos. Si es necesario, ajustemos la sal.
Sirvamos nuestras Tostadas con col rizada y panceta crujiente, inmediatamente y muy calientes, pero también están deliciosas a temperatura ambiente.
Consejos
Si te sobran tostadas, puedes conservarlas en el frigorífico, pero te aconsejo quitarlas del pan.
Guarda separadamente tanto el condimento como el pan, en un recipiente con cierre hermético.
Puedes luego reensamblarlas, calentando el pan y la verdura, en sartén o en microondas.

