Esta pasta cremosa se prepara con la sobrante, de cualquier sabor y condimento. Es facilísima de hacer y se prepara en 5 minutos. De hecho, solo necesitas 4 ingredientes: la pasta sobrante, la bechamel (si no la tienes lista, aquí puedes encontrar la receta para hacerla de manera fácil y rápida sin mantequilla: lee aquí), la provola u otro queso a elección y el parmesano rallado.
La pasta sobrante cremosa es ideal para un almuerzo o cena de último minuto, sobre todo cuando estamos con prisa y tenemos pasta en el frigorífico esperándonos. ¡Una receta de cero complicaciones! Los pasos son tan sencillos que una vez la pruebes, siempre la harás así, de hecho, le va cualquier condimento: la mía era con calabacines y nata, pero también sirve la clásica con salsa, pasta en blanco, con champiñones, con ragú… en fin, ¡cualquier sabor será perfecto!
Puedes cocinar la pasta sobrante cremosa en freidora de aire, para una cocción mucho más rápida, o en horno caliente aumentando grados y tiempos de cocción. ¡Abajo encuentras todas las indicaciones de cocción! Yo usé la bandeja 20×20 cm, adecuada para freidoras de aire de al menos 21-22 cm por lado; la encuentras CLICANDO AQUÍ.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 2-3
- Métodos de Cocción: Freidora de aire
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g Pasta sobrante (cualquier sabor)
- 300 g bechamel
- 250 g provola (o otro queso)
- c.s. parmesano rallado
Herramientas
- Freidora de aire
Pasos
Primero, sacamos del frigorífico la pasta sobrante (vale de cualquier sabor o condimento). Preparamos también lo necesario: la bechamel (si no la tienes, puedes hacerla siguiendo la receta que encuentras CLICANDO AQUÍ), la provola cortada en dados y el parmesano rallado.
En una bandeja (mira la mía: 20×20 cm) ponemos la mitad de la pasta; encima esparcimos unas cucharadas de bechamel hasta cubrirla completamente, luego añadimos la provola en dados. Agregamos el resto de la pasta, esparcimos más bechamel, más provola en dados y finalmente una buena espolvoreada de parmesano rallado.
En este punto (IMPORTANTE) colocamos encima una hoja de papel de horno y sellamos bien con papel de aluminio. De este modo se cocinará bien por dentro, sin quemarse por encima. Cocinamos en freidora de aire a 180 grados durante 20 minutos, quitando la cobertura en los últimos 5 minutos para gratinar la superficie. O también podemos cocerlas en horno caliente a 190 grados durante 30-35 minutos.
Emplatamos la pasta sobrante cremosa y disfrutamos. ¡Buen provecho!
Consejos para ti
✔ Para cocinar la pasta sobrante cremosa he utilizado una bandeja antiadherente de 20x20cm. Si no la tienes, la encuentras en Amazon clicando aquí.
✔ Importante: utiliza papel de horno y papel de aluminio para la cocción: esto permitirá que los canelones se cocinen bien por dentro. Retíralo solo cuando queden 4 minutos para el final, de esta manera no se quemará y seguirá cremosa para poder poner encima los pistachos triturados.
✔ Las lasañas con champiñones y brie se conservan en el frigorífico hasta 2 días. Si no tienes tiempo de cocinarlas, puedes hacerlas y congelarlas para luego cocinarlas en el momento. En este caso, te recomiendo sacarlas del congelador al menos 2 horas antes, y luego puedes proceder con la cocción como se indicó anteriormente, aumentando unos minutos.
✔ Para esta receta, he usado la freidora de aire COSORI 4.7 que encuentras en Amazon aquí.
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FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Por qué utilizas también papel de horno?
El papel de horno se inserta con el papel de aluminio para evitar que las lasañas estén en contacto directo con el papel de aluminio. De hecho, incluso sin papel de horno, no pasa nada si las lasañas se cubren directamente con el aluminio, pero de esta manera digamos que todos están “más seguros”.
¿El papel de aluminio hace mal?
Más que una pregunta, a menudo me lo plantean como una “afirmación”. En cualquier caso, la respuesta es no: no hace mal. De hecho, el papel de aluminio que se vende en el supermercado es para uso alimentario y solo puede causar problemas en temperaturas extremas. Recuerda que, de base, el papel de aluminio también se usa en el horno, y este llega incluso a temperaturas muy altas como 260 grados, a diferencia de la freidora de aire que como máximo puede llegar a 205 grados (y en algunas freidoras a 230, una rareza), y, de todos modos, incluso con la temperatura máxima del horno no se llegan a tener problemas. ¡Así que tranquilos! En cualquier caso, como has visto, he insertado el papel de horno entre las lasañas y el aluminio para que todos estén más tranquilos.

