Preparación

• Lleva a ebullición una olla de agua, añade la sal y cuece la pasta siguiendo los tiempos indicados en el paquete.
  Elige un formato que recoja bien el condimento, como macarrones, farfalle o tortiglioni.

• Lava los calabacines, córtalos en bastones o en rodajas finas.
  Limpia las flores de calabaza eliminando el pistilo interno y el polen, luego córtalas en tiras.

• En una sartén calienta un chorrito de aceite con un diente de ajo entero.
  Añade los calabacines y dóralos a fuego medio durante 4-5 minutos.
  Agrega las flores de calabaza y cubre con una tapa durante 2 minutos, de modo que el vapor las mantenga suaves.

• Apaga el fuego, elimina el ajo e incorpora la ricotta.
  Mezcla bien para obtener una crema homogénea, ajustando de sal y pimienta.

• Escurre la pasta al dente, reservando un poco de agua de cocción.
  Viértela en la sartén con el condimento y mezcla bien. Si es necesario, añade una cucharada de agua de cocción para hacer el conjunto más cremoso.

• Sirve inmediatamente y, si lo deseas, añade una pizca de pimienta negra o un chorrito de aceite en crudo para realzar los sabores.

  Si buscas un primer plato rápido, ligero y lleno de sabor, esta pasta con calabacines y flores de calabaza ¡es perfecta para ti! Se prepara en pocos minutos, con ingredientes sencillos y frescos, ideales para la temporada de primavera y verano.
  La ricotta hace que el condimento sea cremoso sin ser pesado, sustituyendo la clásica nata y dando al plato una consistencia aterciopelada. Es una excelente idea para un almuerzo ligero pero sabroso, listo en el tiempo de cocción de la pasta. ¡Descubre todos los secretos para prepararla de la mejor manera!