Pasos

• Comenzamos la preparación de la berenjena a la parmigiana con pescado partiendo por cortar a nuestra bella y violácea protagonista colocándola sobre una tabla de cortar. Elijan un cuchillo sin sierra. Cortamos tantas rodajas como sea posible de la berenjena de similar grosor. Así será más fácil asarlas y cocinarlas de manera homogénea. Si tienen dudas, pueden ver la video receta que está enlazada arriba.

  Cortadas todas las rodajas, comenzamos a cocinar la berenjena. Tomamos una parrilla, en mi caso de hierro fundido y de hornilla. Si tienen la parrilla eléctrica irá perfecto. Colocamos las rodajas de berenjena sobre una bandeja y espolvoreamos con sal, pimienta y perejil. Dejamos enfriar.

  Mientras tanto, volvemos a la tabla de cortar, tomamos los tomatitos, en mi caso unos pachino que ya había comprado para preparar la Pasta pachino y aceitunas taggiasca, y los dividimos en 4 partes. Vertemos los tomatitos en un tazón y los aliñamos con aceite de oliva virgen extra, sal y albahaca. Si prefieren, pueden sustituir la albahaca por orégano.

  

• Con los tomatitos y las berenjenas listas, solo nos queda trabajar la robiola, que será nuestra crema para la parmigiana con berenjenas a la parrilla. Tomamos entonces el segundo tazón y vertemos en su interior la robiola, las 2 cucharadas de leche y la cucharada de salsa de tomate. Trabajamos con un tenedor o con una de las cucharas. Debemos obtener una crema no muy densa. Si es necesario, agreguen más leche.

  Encendemos el horno en modo estático a 180 grados. Como en todas mis recetas que prevén la cocción al horno, les recuerdo que el mío, o más bien mi padre se los recuerda esta vez, tiene 24 años. Por eso, el viejito tiene cambios de humor significativos, a veces los 180 grados parecen 70 y otras parecen 200. Por eso nunca me alejo demasiado para poder controlar que no haga travesuras. Dicho esto, si también su horno a veces hace de las suyas, estén atentos, no debe oscurecerse demasiado la superficie de nuestra parmigiana de berenjenas y, por lo tanto, no debe quedar demasiado seca. No hay de hecho queso como la mozzarella para hacerla más cremosa y húmeda, ni hay bechamel ni nata.

  Tomamos la bandeja de horno, en mi caso redonda porque no encuentro mi amada bandeja cuadrada transparente. ¡Llamado a Quién lo ha visto! Mojamos con un poco de aceite de oliva virgen extra el fondo y comenzamos a colocar las berenjenas a la parrilla. Corté por la mitad dos berenjenas para cubrir bien la bandeja y no dejar huecos en el fondo. Mojamos luego las berenjenas con la mezcla de leche y robiola y colocamos los tomatitos. Colocamos el salmón y espolvoreamos con un poco de perejil o mejorana.

  Procedemos así hasta terminar los ingredientes, en mi caso he creado solo dos capas. Horneamos la parmigiana de salmón y berenjenas a 180 grados durante unos 30 minutos. Una vez lista, déjenla enfriar antes de cortarla, así el queso se enfría y no se deshacen las capas.

  Solo me queda recordarles que los espero en el blog con muchas otras recetas fáciles como esta, en los perfiles sociales con mucho contenido extra y, como siempre, ¡buen provecho!