La tarta con amaretti, fácil, cremosa y con aroma a hogar, es una de esas recetas que en mi familia nacen casi por casualidad. Esta vez el mérito es de mi prima Bárbara, que colabora mucho con mi blog y que no pierde la ocasión de probar algo nuevo. Navegando por la web ha visto esta tarta cubierta de amaretti y se ha dejado tentar de inmediato: al día siguiente la preparó y me contó que no solo es sencilla de hacer, sino también sorprendentemente buena.
La base es mi clásica masa quebrada sin reposo, mientras que el relleno combina la suavidad de la ricotta con la cremosidad de la crema pastelera, para obtener un relleno suave, rico y perfumado. Para completar todo, una cobertura de amaretti que al hornearse se amalgama perfectamente con la masa, regalando un sabor particular y envolvente.
Es una tarta que huele a familia, perfecta para el domingo, para una merienda especial o cuando se quiere llevar a la mesa un postre que sepa unir tradición y golosidad.
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 12
- Métodos de Cocción: Hornilla, Horno, Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 500 g harina 00
- 180 g azúcar
- 1 huevo
- 1 yema
- 250 g mantequilla (blanda)
- aroma de vainilla (o cáscara de limón)
- 250 g leche
- 80 g azúcar
- 2 yemas
- 25 g almidón de maíz
- aroma de vainilla
- 400 g ricotta
- 40 amaretti (aproximadamente)
Herramientas
- 1 Molde para hornear
Preparación
Para empezar, toma todos los ingredientes previstos para tu masa quebrada sin reposo y colócalos en la batidora. Utiliza el gancho de hoja y deja que la masa se trabaje hasta que se forme un bollo suave y homogéneo. Cuando la masa esté lista, transfiérela a la superficie de trabajo ligeramente enharinada y extiéndela con el rodillo hasta obtener una lámina uniforme. Forra un molde de 26 cm con un hoja de papel de horno y coloca encima la masa quebrada, arreglando las posibles arrugas y recortando el exceso. La parte sobrante de la masa guárdala, porque se necesitará más adelante para la cobertura.
En un bol grande combina 400 g de crema pastelera y 400 g de ricotta bien escurrida. Con un tenedor mezcla con calma, aplastando los posibles grumos, hasta obtener una crema lisa, homogénea y bien amalgamada. Esta será la crema suave que hará que la tarta sea cremosa y perfumada.
Vierte la crema de ricotta y crema pastelera sobre la base de masa quebrada ya colocada en el molde. Con el dorso de una cuchara nivélala bien, para distribuirla de manera uniforme por toda la superficie. En este punto empieza a cubrir la crema con los amaretti.
Colocamos bien los amaretti poniéndolos uno al lado del otro, solo apoyándolos ligeramente sobre la crema, hasta cubrir completamente toda la superficie de la tarta.
Retoma la masa quebrada sobrante y colócala sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada. Si no eres muy práctica, puedes ayudarte colocando la masa entre dos hojas de papel de horno: de esta manera se extiende más fácilmente y no se rompe.
Con el rodillo extiende un disco de masa quebrada más fino respecto a la base.
Cuando hayas obtenido la lámina del tamaño adecuado, colócala con delicadeza sobre los amaretti, cubriendo toda la superficie.
Sellar bien los bordes, presionando ligeramente con los dedos para unir la cobertura a la base.
Finalmente, solo queda meter la tarta al horno: ponla en el horno ya caliente a 180°C y déjala cocer durante 35–40 minutos, o al menos hasta que la superficie esté bien dorada. Una vez lista, déjala templar antes de sacarla del molde, así la masa quedará compacta y la crema en su interior se asentará a la perfección.
⭐ Notas finales de la receta
Esta tarta ricotta, crema y amaretti es un dulce que conquista desde el primer bocado: crujiente por fuera, suave por dentro y con ese aroma a hogar que siempre gusta a todos. Una vez horneada, déjala enfriar completamente: de esta manera el relleno se estabiliza y los sabores se armonizan a la perfección.
Cuando esté bien fría, puedes hacerla aún más elegante con un ligero velo de azúcar glas, que resalta el color dorado de la masa y completa el dulce con un toque delicado.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Puedo preparar la tarta con amaretti el día antes?
Sí, ¡incluso es más rica! Prepararla el día antes permite que el relleno de ricotta y crema pastelera se compacte y los amaretti se amalgamen mejor con la masa, haciendo el sabor más armonioso.
¿Puedo sustituir los amaretti con otro ingrediente?
Si no te gustan los amaretti puedes usar galletas secas o galletas trituradas, pero el sabor cambiará. Los amaretti son lo que le da a esta tarta el sabor particular y perfumado que la hace única.
