La coliflor gratinada es una receta muy fácil y apetecible de preparar tanto como guarnición como segundo, y podemos proponerla tanto para el almuerzo como para la cena. La bechamel que cubre las coliflores ayuda a crear una costra deliciosa y fragante. Este delicioso plato se prepara aproximadamente en una hora.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 1 Hora
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera
Ingredientes
- 1 Coliflor (grande)
- 500 ml Leche
- 20 g Harina 00
- 15 g Mantequilla
- c.s. Sal fina
- c.s. Nuez moscada
- c.s. Pimienta molida
- 3 cucharadas Queso (rallado)
- 100 g Provola ahumada
- 5 Tomates secos
Preparación
1) Ponemos a hervir abundante agua y añadimos también los tomates secos.
2) Mientras tanto, eliminamos las hojas exteriores de la coliflor. Lavémosla bajo agua corriente y dividámosla en floretes.
3) Apenas el agua llegue a hervor, retiramos los tomates secos y añadimos los floretes de coliflor, dejándolos escaldar por un máximo de 4 minutos. Finalmente, escurrámoslos perfectamente y coloquémoslos en una sopera.
Piquemos finamente los tomates secos y añadámoslos a la coliflor escaldada.
4) Preparamos la bechamel. En un cazo, hacemos derretir completamente la mantequilla, en el fogón pequeño a fuego bajo. Luego, añadimos la harina ya tamizada y mezclamos rápidamente durante unos 30 segundos (para que la harina se cocine).
5) Añadimos la leche toda junta y mezclamos. Manteniendo el fuego bajo, salamos, pimientamos y añadimos una pizca de nuez moscada. Mezclamos hasta que la bechamel cubra la cuchara, comenzando a espesarse.
6) Encendemos el horno y lo llevamos a la temperatura máxima.
7) Vertemos la bechamel caliente sobre las coliflores (reservemos 4 cucharadas), el queso rallado y la provola en cubos. Mezclamos todos los ingredientes para distribuirlos de manera uniforme.
8) Vertemos todo en una fuente para horno (o en moldes individuales), esparcimos con la bechamel restante y unas cucharadas más de queso rallado. Horneamos en la bandeja más baja del horno ya caliente y dejamos gratinar por unos 20 minutos. Apagamos y dejamos que la coliflor gratinada se enfríe por unos minutos antes de servirla.