La ensalada de pollo y verduras es una preparación muy sabrosa, típicamente veraniega porque se disfruta fría, pero, en realidad, es perfecta también como comida de táper para el trabajo o para el tiempo libre. Las verduras frescas y las especias hacen que nuestra ensalada de pollo sea mucho más aromática y deliciosa. Se prepara con mucha antelación (el día antes) y se puede personalizar según las necesidades y gustos. La ensalada de pollo y verduras es adecuada como plato único para disfrutar en la playa, en el trabajo, en el almuerzo y en la cena, porque es nutritiva y ligera al mismo tiempo.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 1 Hora
- Porciones: 4 porciones
- Métodos de Cocción: Estufa
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Verano y Otoño, Todas las estaciones
Ingredientes
- 1 kg pechuga de pollo
- 5 Tomates para ensalada
- c.s. Albahaca
- c.s. Cebollino
- 2 hojas Laurel
- c.s. Aceite de oliva virgen extra
- c.s. Sal fina
- 1 cogollo Lechuga
- 1 Cebolleta
- c.s. Ralladura y jugo de 1 limón
- 1/2 cucharadita sal fina
- 500 g champiñones
- c.s. aceitunas verdes y negras
- 1/2 vaso vino blanco seco
- 1 zanahoria
- 1 pizca curry
Preparación
Eliminamos las partes grasas de la pechuga de pollo (podemos usar también muslos, contramuslos) y la dividimos en dos partes, a lo largo.
La trasladamos a una olla grande que pondremos en la estufa media.
Añadimos la ralladura (solo la parte amarilla externa) de un limón entero, 1 zanahoria, el tallo de la cebolleta fresca, 2 hojas de laurel y el vino (necesario para que la carne de pollo se mantenga tierna y jugosa) y llenamos con agua hasta cubrir un dedo por encima de los ingredientes. A gusto podemos añadir también otras especias.
Encendemos la estufa media, llevándola a llama baja, tapamos y esperamos que el agua llegue a ebullición. La pechuga de pollo deberá llegar a ebullición poco a poco.
A partir de la primera ebullición, calculamos 5 minutos, luego salamos, tapamos de nuevo, dejamos que recupere la ebullición y dejamos hervir, siempre a llama baja, por otros 10 minutos.
Finalmente, apagamos y dejamos el pollo en el agua hasta que esté tibio (aproximadamente un par de horas).
Luego, tiramos el agua de cocción y ponemos el pollo en la nevera, en un recipiente de acero o vidrio cerrado y lo dejamos 12 horas. Este paso en la nevera nos permitirá cortar el pollo sin problemas.
Preparamos los champiñones que enriquecerán la ensalada de pollo. Deberán ser solo escaldados, no fritos.
Los limpiamos, los cortamos en láminas no demasiado finas, los lavamos y los ponemos en una sartén de acero con tapa, sin añadir grasas de ningún tipo.
Transferimos la sartén a la estufa media y, a fuego alto, dejamos que pierdan el agua de vegetación.
Tan pronto como nos demos cuenta de que se ha formado líquido en la sartén, sin quemarnos, lo tiramos, quizás usando un colador.
Volvemos a poner los champiñones en la sartén y repetimos esta operación, esperando que se forme de nuevo líquido de vegetación y tirándolo.
Ponemos nuevamente los champiñones en la sartén, tapamos, bajamos la llama al mínimo y dejamos que se forme el agua de cocción que esta vez no tiraremos.
Desde que se forme el agua, calculamos 10 minutos, durante los cuales, manteniendo siempre la llama baja, mezclaremos los champiñones de vez en cuando y completaremos su cocción.
Los escurrimos, luego, con un colador, los salamos lo mínimo necesario y los volvemos a poner en la sartén o en un bol, para que se enfríen.
Pasadas 12 horas, sacamos el pollo de la nevera, lo cortamos primero en láminas no demasiado gruesas (medio dedo es suficiente) y luego en tiras. Lo pasamos a un bol grande.
Lavamos y quitamos las partes de desperdicio de los tomates y los cortamos en daditos.
Cortamos la lechuga (o la ensalada iceberg) en tiras, la lavamos y dejamos que escurra bien.
Deshuesamos las aceitunas y lavamos las hojas de albahaca.
Añadimos la cebolleta cortada muy finamente, los champiñones, la albahaca, (también una pizca de curry y un poco de cebollino picado muy finamente, si gusta), una cucharada de jugo de limón y otros ingredientes según nuestros gustos.
Ajustamos la sal si es necesario, condimentamos con aceite de oliva virgen extra, mezclamos bien y dejamos reposar la ensalada de pollo y verduras en la nevera hasta el momento de servirla.