Los espaguetis con salsa de anchoas frescas son una verdadera delicia. Con pocos y sencillos ingredientes se obtiene un primer plato ligero, con un sabor y aroma extraordinarios. Es un plato fácil, que se prepara mientras se cuece la pasta. Podemos personalizarlo, añadiendo una pizca de guindilla, algunas aceitunas negras; orégano o perejil para aromatizar. En esta preparación, lo ideal sería utilizar los tomatitos del «piennolo» del Vesubio; en su defecto, sin embargo, podemos usar tomatitos cherry.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Verano
Ingredientes
- 250 g espaguetis
- 300 g anchoas frescas
- 15 tomatitos del Piennolo (o tipo "cherry")
- 1 diente ajo sin germen interno
- c.s. aceite de oliva virgen extra
- c.s. alcaparras (opcionales)
- c.s. orégano fresco o seco (o perejil)
- un trocito de guindilla
Pasos
Eliminamos las vísceras y las espinas de las anchoas y las lavamos bajo agua corriente. Las transferimos a un colador para que pierdan el exceso de agua.
Cortamos los tomatitos por la mitad, después de lavarlos.
Ponemos a hervir el agua para los espaguetis; apenas hierva, añadimos la pasta. Salamos muy poco, porque ya están las alcaparras.
Enjuagamos bajo agua corriente las alcaparras para eliminar el exceso de sal en la superficie. Las secamos con un paño de cocina o papel absorbente y las picamos finamente junto con el ajo y la guindilla, luego ponemos a dorar el picadillo, a fuego bajo, en 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
Cuando el ajo esté bien dorado (lo notaremos por el aroma), subimos el fuego y añadimos las anchoas. Las dejamos dorar por todos lados durante un minuto aproximadamente, mezclando delicadamente con un tenedor de madera (las anchoas tienen una cocción muy rápida).
Añadimos los tomatitos, ajustamos de sal, solo si es necesario, bajamos el fuego, tapamos y dejamos que los tomatitos se ablanden durante al menos un par de minutos (si la pasta aún no está cocida, apagamos la salsa de anchoas frescas sin embargo, sin quitar la tapa; de esta forma, los tomatitos se ablandarán igualmente, liberando todo su aroma y sabor y los jugos de cocción se mantendrán dentro, manteniendo las anchoas tiernas).
Escurrimos la pasta al dente y la añadimos a la salsa, mezclamos bien a fuego alto, completamos con orégano fresco o seco o perejil picado y servimos de inmediato.
Buen provecho