Las galletas bicolores son unos deliciosos dulces sin huevo para disfrutar en el desayuno o para llevar en la fiambrera del colegio. Son muy fáciles de preparar, deliciosas y también son excelentes con el café y con el té de la tarde. Podemos personalizarlas según nuestros gustos, añadiendo las especias que prefiramos, pasas, trocitos de chocolate, frutos secos u otros. Además, podemos reemplazar el azúcar con miel de mil flores, añadiendo 70 gr. en la masa blanca y 80 gr. en la parte de cacao. Son absolutamente para probar.

- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 1 Hora
- Porciones: 25 galletas bicolores
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g Harina 00
- 100 g Azúcar
- 10 ml Licor
- 90 ml Leche
- 70 g Mantequilla blanda
- 1 pizca Sal fina
- 2 g Levadura en polvo para dulces
- 1/4 cucharadita Canela en polvo
- 225 g Harina 00
- 25 g Cacao amargo en polvo
- 120 g Azúcar
- 70 g Mantequilla blanda
- 100 ml Leche
- 1 pizca Sal fina
- 2 g Levadura en polvo para dulces
- c.s. Cáscara de naranja
Preparación
1) Preparemos la parte blanca. En un robot de cocina ponemos el azúcar y la mantequilla y batimos con las varillas hasta obtener una crema. Luego, añadimos la leche, el licor, la levadura, la pizca de sal, la canela y la harina tamizada. Amasamos durante aproximadamente un minuto hasta que se forme una masa compacta y suave. La transferimos a una mesa de trabajo enharinada, la redondeamos con las manos y la cubrimos con un paño.
2) Pasemos a la parte de cacao. Amasamos todos los ingredientes durante un minuto con el mismo criterio de la parte blanca y en cuanto se forme un bloque compacto, lo trasladamos a la mesa enharinada.
3) Extendemos con el rodillo ambos bloques (aproximadamente 1 milímetro de grosor) y superponemos la parte de cacao a la blanca o viceversa, según nuestros gustos. Tratamos de dar las mismas dimensiones a ambas láminas; recortamos y apartamos el excedente de masa que utilizaremos para hacer otras galletitas o decoraciones.
4) Enrollamos bien apretadas las dos láminas, sin aplastarlas demasiado con los dedos; obtendremos un cilindro. Con un cuchillo bien afilado, cortamos nuestras galletas bicolores de aproximadamente un dedo de grosor y las colocamos, una a una, en una bandeja con papel de horno. Pasamos la bandeja al frigorífico durante 30 minutos, para que se endurezca la mantequilla presente en las galletas.
5) Mientras tanto, encendemos el horno a 180 grados. Transcurrido el tiempo de reposo en el frigorífico, sacamos la bandeja y la horneamos en el horno caliente a media altura durante aproximadamente 20/25 minutos como máximo, hasta que las galletas estén doradas tanto arriba como abajo. Las sacamos del horno y las dejamos enfriar; se volverán cada vez más crujientes.