Las galletas con pasas sin huevo son unos deliciosos pastelitos, perfectos para el desayuno, la merienda y el tiempo libre. Son muy fáciles de hacer, pueden ser consumidos incluso por aquellos que son intolerantes al huevo y se pueden personalizar de varias maneras. Preparémoslas para acompañar la pausa del café, después de la cena o para esos momentos en los que nos apetece «algo rico». Las galletas con pasas sin huevo se conservan durante varios días, bien cerradas en una bolsa de alimentos o en una caja de lata.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 25
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera, Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g harina 00
- 125 ml leche
- 90 g azúcar granulada
- 75 g pasas
- 60 g mantequilla blanda
- 2 g levadura en polvo
- 1 pizca sal fina
- 1 cucharadita licor al gusto
- c.s. ralladura de naranja
Preparación
Lavamos las pasas bajo agua corriente y las ponemos en remojo en un poco de agua caliente durante 10 minutos, para que se ablanden.
Sacamos la mantequilla y la cortamos en dados, así será mucho más fácil y rápido incorporarla a los demás ingredientes.
Rallamos finamente la cáscara de una naranja.
En un bol grande, batimos con las varillas eléctricas la mantequilla, la ralladura de naranja y el azúcar juntos, hasta obtener una crema espumosa (un par de minutos como máximo).
Después de 10 minutos, escurrimos las pasas, las secamos con un poco de papel absorbente y las añadimos a la mezcla de mantequilla y azúcar. Agregamos todos los demás ingredientes y los mezclamos con las varillas eléctricas hasta obtener una masa suave, cremosa y homogénea. Si la masa de las galletas resulta demasiado dura (porque no todas las harinas absorben los líquidos de la misma manera), podemos añadir una cucharadita o cucharada adicional de leche según la consistencia que queramos obtener.
Forramos una bandeja con papel de horno y, ayudándonos con 2 cucharaditas, formamos bolas un poco más grandes que una nuez y las colocamos en la bandeja, separadas entre sí aproximadamente un dedo.
Llevamos la bandeja, bien cubierta, al frigorífico durante al menos 30 minutos; de esta manera, las galletas mantendrán mejor la forma durante la cocción, sin aplanarse demasiado.
Después de 30 minutos, encendemos el horno a 180* y horneamos las galletas de pasas sin huevo durante unos 20-25 minutos (siempre controlar la cocción, ya que el tiempo de cocción puede variar de un horno a otro).
Cuando la base de las galletas esté dorada, significa que están listas. Apagamos el horno, encendemos el grill durante unos minutos para dorarlas también en la superficie.
Las sacamos del horno, las dejamos enfriar y las espolvoreamos con azúcar. Estas deliciosas galletas se conservan en una caja de lata o en una bolsa para alimentos.
