Aquí están, mis galletas sin huevo semi integrales con sabor a cebada. Sí, porque esta vez he usado cebada soluble en lugar de cacao o café, dos de mis ingredientes favoritos. La cebada soluble me gusta mucho, no solo por su aroma y sabor, sino porque es práctica, se disuelve fácilmente, no contiene cafeína, es rica en fibras y puede ser utilizada en innumerables recetas. Estas galletas son para mojar, pero, en realidad, también se pueden comer como tentempié en el tiempo libre. No contienen mantequilla, son realmente muy sencillas de hacer y te sorprenderán por lo deliciosas que son.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 20
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g harina 00
- 250 g harina integral
- 20 g cebada soluble en polvo
- 170 g azúcar
- 1/2 sobre levadura en polvo para dulces
- 1 pizca sal fina
- 1 pizca canela en polvo
- 1 sobre vainillina
- 160 ml leche
- 70 ml aceite de semillas
Preparación
En un bol muy grande empezamos a poner todos los ingredientes secos (harinas, sal, azúcar, cebada, especias). Podemos añadir, si nos gusta, también una cucharadita de licor Strega, u otro al gusto, y mezclamos.
Añadimos la leche y el aceite y amasamos bien. Deberá resultar una masa suave pero al mismo tiempo firme, compacta y no pegajosa, que dividiremos en dos o tres barras (dependiendo del tamaño que queramos dar a las galletas). Colocamos las barras en una bandeja con papel de horno, las aplastamos con las manos y las cortamos con un cuchillo bien afilado (podemos darles la forma que queramos).
Cuando hayamos cortado las galletas, cubrimos la bandeja y la ponemos en la nevera durante una hora, en la parte más baja.
Pasado el tiempo de reposo, las horneamos en el horno ya caliente a 180° durante unos 35/40 minutos. Después de sacar las galletas del horno, estarán aún un poco blandas, pero se volverán más secas a medida que se enfríen. Dejémoslas enfriar bien y guardémoslas en una caja de galletas o en una bolsa para alimentos.
Con estas cantidades podemos obtener de 20 a 50 galletas dependiendo del tamaño que les demos.
Si deseáis glasear las galletas semi integrales sin huevo con sabor a cebada, podéis hacerlo de esta manera: disolved 120 g de azúcar glas con 2 cucharaditas de jugo de naranja, limón, café o licor (si fuera necesario podemos añadir alguna gota más), mezclad hasta que todo el azúcar glas se haya impregnado y se vuelva cremoso. Mojad la parte superior de las galletas y dejad que el glaseado se seque antes de disfrutarlas.