El jamón de cerdo a la sartén es un segundo plato suculento muy fácil y rápido de preparar. En general, en mi casa, el jamón de cerdo se acompaña con las «papaccelle», es decir, unos pequeños pimientos redondos y dulces puestos a marinar en vinagre. La particularidad de esta preparación radica en el hecho de que la carne, aunque frita, no resultará seca; no será, de hecho, necesario marinarla o golpearla con el mazo de carne para obtener una consistencia final muy suave y jugosa en el interior, una auténtica delicia.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Fritura
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Invierno, Primavera
Ingredientes
- 4 rodajas jamón de cerdo
- c.s. sal y pimienta
- c.s. pan rallado
- c.s. aceite de semillas para freír
Preparación
En un plato ancho y llano, vertemos suficiente pan rallado para empanar las 4 rodajas de cerdo.
Ponemos aceite en una sartén grande antiadherente y lo llevamos a temperatura.
A menudo las rodajas de jamón de cerdo son grandes y largas, podemos también dividirlas a la mitad para acortar los tiempos o facilitar su cocción.
Empanamos muy bien las rodajas de jamón de cerdo por ambos lados y sacudimos el exceso de pan rallado.
Tan pronto como el aceite esté caliente, ponemos a freír las rodajas de jamón de cerdo. Dependiendo del grosor, deberán cocinarse aproximadamente 1 o 3 minutos por lado, a fuego vivo, teniendo cuidado de no quemarlas. Les damos la vuelta usando unas pinzas (no tenedores); la carne, de hecho, no debe perforarse para evitar que se seque.
Cuando las rodajas estén doradas por ambos lados, las sacamos del aceite y las colocamos en un plato de servir. Les echamos sal y pimienta al gusto y las servimos de inmediato. Se derretirán en la boca por su suavidad.
En cuanto al grosor, podremos cortarlas finas o incluso de aproximadamente un centímetro; obviamente cuanto más fina sea la carne, más rápida será la cocción. Las rodajas en la foto tienen aproximadamente 1 centímetro de grosor.
La idea extra. Personalmente, me gusta añadir también albahaca fresca picada a mano, cuando les echo sal y pimienta; da un aroma aún más tentador. Rellena un bocadillo con el jamón de cerdo a la sartén; es simplemente delicioso.