La lasaña con salmón y grelos es un delicioso primer plato de pescado, ligero y de sabor delicado. Son muy fáciles, excelentes para preparar durante las fiestas o como almuerzo dominical, pero sobre todo para preparar para el almuerzo de Pascua. La bechamel, aromatizada con cebollino fresco, es muy delicada y no cubre el sabor ni del salmón ni de los grelos. El cebollino le confiere al plato un aroma y un perfume muy agradable y fresco.
Recomiendo utilizar láminas de pasta fresca porque se cocinan rápidamente, especialmente si usamos salmón crudo. Evitaremos, de hecho, que el salmón, cuya carne también se cocina en pocos minutos, se vuelva correoso o seco.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 1 Hora
- Porciones: 6
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 250 g láminas de pasta fresca para lasaña
- 250 g salmón (fresco o enlatado)
- 750 g grelos
- 50 g salmón ahumado (opcional)
- c.s. sal fina
- 700 ml leche
- 35 g mantequilla
- 35 g harina 00 (o maicena)
- c.s. sal fina
- c.s. pimienta
- c.s. nuez moscada
- 1 pizca cebollino seco o 10 hilos de fresco
Herramientas
- 1 Bandeja
Pasos
Escurrimos perfectamente el salmón del aceite o del agua de conservación; si, en cambio, usamos el fresco, por favor, quita la piel exterior y las espinas con unas pinzas y, en este caso, lo añadiremos crudo a la lasaña.
El salmón, tanto crudo como enlatado, se debe cortar en trozos.
Escaldamos los grelos en agua salada. Deben quedar muy tiernos y el tallo casi deshecho. Yo los escaldo durante 8 minutos desde el primer hervor. Los escurrimos y los reservamos.
Preparamos la bechamel. En un cazo derretimos a fuego lento la mantequilla. Tan pronto como se derrita, añadimos la harina y mezclamos con un batidor, hasta crear una especie de crema, que dejaremos cocinar, removiendo continuamente, durante unos 30 segundos. Luego, añadimos de una vez la leche y seguimos mezclando. Salamos, añadimos pimienta y cebollino. Dejamos cocer, siempre a fuego lento, hasta que la bechamel comience a espesarse (con esta cantidad de harina, la bechamel quedará fluida). Al final de la cocción, añadimos el salmón ahumado finamente picado con cuchillo, para una explosión de sabor y aroma.
Recomiendo verter la bechamel sobre la lasaña cuando aún está caliente; de esta forma se acortarán aún más los tiempos de cocción.
Montamos nuestra lasaña con salmón y grelos. En el fondo de la bandeja ponemos unas cucharadas de bechamel. Colocamos la primera capa de láminas, añadimos trozos de salmón, grelos desmenuzados con las manos, un poco de bechamel y continuamos con la 2* capa, hasta terminar los ingredientes y las capas de pasta. Mojamos la última capa con la bechamel restante, decoramos con más salmón y trozos de grelos y la metemos al horno durante unos 15 minutos, en la bandeja más baja, a 200*.
