La pechuga de pollo especiada a la sartén es un segundo plato pensado para disfrutar frío, aunque, en realidad, lo preparo a menudo incluso en invierno. Es una receta muy suculenta, fácil y que se prepara con antelación. Podemos servir nuestra pechuga de pollo con una deliciosa y fresca salsa tzatziki, salsa tonnata, compota de cebolla rápida, crema de pimientos, salsa caprichosa, salsa de atún rápida; o, en invierno, podemos acompañarlo con su jugo de cocción, rico y aromático. Para hacer aún más delicioso nuestro segundo plato podemos añadir muchas verduras frescas tanto crudas como cocidas, como pepinos, zanahorias, pimientos, judías verdes, guisantes, etc… La carne quedará tierna y jugosa gracias a la lenta cocción a fuego bajo y suave. Debo agradecer a mi cuñada por haberme dado a conocer esta deliciosa receta.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 12 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Verano
Ingredientes
- 1 kg pechuga de pollo
- 1/2 cebolla en rodajas (dorada o blanca)
- 1 diente ajo
- 2 ramitas romero
- c.s. granos de pimienta o pimienta de Jamaica
- 2 zanahorias
- 1/2 vaso vino blanco seco
- c.s. sal gruesa
- c.s. aceite de oliva virgen extra
- 2 vasos agua hirviendo
Preparación
Dividimos la pechuga de pollo en dos partes por el lado de la unión.
En una sartén hacemos dorar, en dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra, a fuego bajo en el quemador más pequeño, la cebolla en rodajas y el ajo con piel.
Mientras tanto, ponemos a calentar los dos vasos de agua en un cazo pequeño.
Tan pronto como la cebolla se ablande, añadimos los dos trozos de pechuga de pollo y dejamos que doren de manera uniforme, a fuego vivo.
Cuando estén bien dorados, mojamos con el vino y dejamos que la parte alcohólica se evapore.
Cuando el alcohol se haya evaporado, añadimos todas las especias y las zanahorias ya lavadas, secas y cortadas en trozos. Sazonamos, añadimos el agua hirviendo, mezclamos y cubrimos.
Dejamos cocinar la pechuga de pollo en el quemador pequeño a fuego suave durante un máximo de 20 minutos.
Pasado el tiempo, apagamos y dejamos la pechuga de pollo en el jugo de cocción, donde continuará cocinándose suavemente, sin volverse excesivamente fibrosa y seca una vez fría.
Cuando la pechuga de pollo esté bien fría, podemos proceder a cortarla en rodajas lo más finas posible (mejor con una cortadora).
Ahora podemos disfrutarla con ellos condimentos que hayamos, mientras tanto, elegido y preparado.
En la categoría «salsas y jugos» encontrarán una amplia selección de preparaciones a base de especias con y sin yogur, atún, albahaca, curry y así sucesivamente, perfectas para condimentar platos de carne, pescado, pasta, arroz, etc…
La idea extra. Si desean utilizar el jugo de cocción, este último debe ser colado y puesto en una sartén a fuego vivo (mezclando a menudo) durante 3-5 minutos con el fin de reducirlo (pueden añadir una cucharadita de harina 00 o de maicena para hacerlo cremoso).
Bon appetit