La tapenade de aceitunas negras es una preparación facilísima y rápida, con una consistencia más o menos cremosa, según los gustos y necesidades. No contiene huevos, ni gluten ni lactosa. Es una receta deliciosa, muy sabrosa, que podemos utilizar para crear refinadas y deliciosas tostadas para aperitivos, bufés o vermuts. Sin embargo, sus usos no terminan aquí; de hecho, la tapenade de aceitunas se puede usar como condimento para la pasta, tanto en invierno como en verano, para acompañar carne y pescado hervidos o asados, para rellenar panettones gastronómicos, tartas saladas y sándwiches. La tapenade de aceitunas, una vez preparada, se puede conservar en la nevera, en un recipiente de vidrio bien cerrado, durante unos días. Este procedimiento se puede utilizar para preparar una tapenade de aceitunas tanto negras como verdes.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 180 gramos
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 250 g aceitunas negras (o verdes)
- 1/2 diente ajo
- al gusto perejil picado
- al gusto aceite de oliva virgen extra
- 1 guindilla (opcional)
- 2 filetes anchoas en aceite
- 5 alcaparras
Herramientas
- 1 Mortero
Pasos
Lavamos las alcaparras bajo agua corriente y eliminamos el exceso de sal. Las secamos con papel de cocina para absorber el agua.
Deshuesamos las aceitunas y las ponemos en una batidora junto con las alcaparras, los filetes de anchoa bien escurridos del aceite, el ajo, la guindilla y el perejil picado muy, muy finamente, y batimos durante unos segundos, vertiendo el aceite poco a poco lentamente (una cucharada pequeña debería bastar).
Obtendremos de inmediato una crema suave (como en la foto a continuación) y muy aromática. No añadimos sal ya que la crema será bastante salada por sí sola. La tapenade de aceitunas está lista para dar sabor a hervidos, sándwiches, tartas saladas y así sucesivamente.
La idea extra. En lugar de usar la batidora, podemos hacer la tapenade de aceitunas con un mortero y decidir si obtener una verdadera crema (tomará unos 5 minutos), o lograr una consistencia más gruesa, donde también se pueden sentir los trozos de aceitunas (toma solo 2 minutos), como se puede ver en la foto de portada. Para facilitar esta operación, pongo en el mortero los ingredientes en parte ya picados o cortados groseramente; luego, ayudándome con el aceite vertido muy lentamente, machaco hasta obtener la consistencia deseada o que necesito para una preparación determinada.
Buen provecho