Hoy os propongo una receta preparada con sobras del almuerzo del domingo, es decir, arroz hervido con el que había hecho unos arancini napolitanos, ragú a la napolitana, una col que yacía solitaria en la nevera y bechamel sin gluten. El plato que resultó, un timbal de arroz con col, es extraordinario, buenísimo, sin gluten, perfecto también como idea para proponer a almuerzo o cena durante la semana, como comida para llevar al trabajo o para una excursión. Como todas mis recetas, también esta es una idea personalizable según gustos y necesidades; o puede ser entendida como un estímulo para reciclar sobras de manera sabrosa, sin mucho esfuerzo y desperdicio. El timbal de arroz y col se puede preparar también desde cero, con salsa de tomate (más rápido que el ragú) hecha al momento; se puede decidir si añadir o no la bechamel y se puede enriquecer el timbal de arroz y col con embutidos, setas, etc.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 10
- Métodos de Cocción: Horno, Hervido
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera
Ingredientes
- 300 g arroz para timbales
- c.s. sal fina
- 250 g ragú
- 50 g mezcla de pecorino y parmesano rallados
- 8 hojas col
- c.s. emmental rallado
- c.s. sal gruesa (para escaldar las hojas de col)
- 250 ml leche (también sin lactosa)
- 15 g mantequilla
- 15 g almidón de maíz
- c.s. sal fina
- c.s. nuez moscada
- c.s. pimienta molida
Herramientas
- 1 Molde desmontable
Pasos
1- Para preparar nuestro delicioso y rico timbal de arroz y col, comenzamos herviendo el arroz (si no tenemos ya cocido previamente) en abundante agua con sal, cociéndolo durante la mitad del tiempo de cocción indicado en el paquete. El tipo de arroz más indicado para esta preparación es sin duda el para timbales.
2- Preparamos la bechamel (si no la tenemos lista) como estamos acostumbrados a hacer o como se describe aquí para la bechamel tradicional, o aquí para la versión sin gluten ni lactosa.
3- Mientras tanto, ponemos a hervir agua en otra olla alta para escaldar las hojas de col
Las hojas de col deben ser grandes y no demasiado tiernas y delgadas porque se romperían (las más indicadas son las iniciales). Lavémoslas y tan pronto como el agua comience a hervir añadimos un puñado de sal gruesa, dejamos que vuelva a hervir y sumergimos las hojas de col.
Llenamos mientras tanto un gran bol con agua fría (y hielo, si es posible) y un poco de sal fina.
Dejemos escaldar por 7 minutos como máximo, escurrimos inmediatamente y sumergimos en el agua fría que interrumpirá la cocción. Revolvemos un poco en el agua fría, escurrimos y dejamos escurrir en un colador el exceso de agua, por unos diez minutos aproximadamente. Probablemente no necesitaréis todas las hojas de col; yo siempre escaldo un par más por si acaso alguna se rompe. Si os sobran, pícalas muy finamente y añádelas a la mezcla de arroz.
Después de unos diez minutos, secamos las hojas suavemente con papel absorbente o un paño de cocina sin olores a detergentes.
Coloquemos una por una sobre una tabla para eliminar la costilla central dura y fibrosa.
4- Tomamos el molde (los moldes antiadherentes, como el de la foto, no necesitan ser aceitados o enmantecados para este tipo de preparación) y lo forramos con las hojas de col, de manera que un extremo sobresalga del molde mientras que el otro extremo se apoye en el interior del agujero central del molde.
5) Encendemos el horno a 180*
6- Escurrimos muy bien el arroz y lo dejamos en la misma olla de cocción. Añadimos el ragú (mejor si está tibio), la bechamel (también caliente, si es posible), los quesos rallados, el emmental rallado (u otro queso a gusto o que os sobre) y mezclamos para amalgamarlos perfectamente. Probamos y salamos un poco más si lo consideramos necesario.
7- Ayudándonos con una cuchara, llenamos el molde con el arroz condimentado, distribuyéndolo lo más uniformemente posible dentro del molde.
Cubrimos el arroz, cerrando con los extremos de las hojas de col y al horno caliente a 180*, durante unos 20 minutos, a media altura.
Pasado el tiempo, lo sacamos del horno y dejamos que se temple durante unos minutos, para poder trasladarlo sin problemas a un plato de servir. El timbal de arroz con col se debe comer caliente.
Buen provecho