Trufas blandas con glaseado de chocolate

Las trufas blandas cubiertas por un delicioso glaseado de chocolate negro son bombones caseros con los que podremos alegrar el postre, el café, el té; o proponer como idea de regalo. Se trata de una receta de muy fácil ejecución que puede ser diversificada, personalizada con esencias, frutos secos, café o licor, para obtener trufas de sabores siempre diferentes.

  • Dificultad: Muy fácil
  • Costo: Económico
  • Tiempo de preparación: 30 Minutos
  • Porciones: 30
  • Métodos de Cocción: Horno
  • Cocina: Italiana
  • Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera, San Valentín

Ingredientes

  • 70 g harina 00 (o harina de arroz o mezcla sin gluten)
  • 70 g mantequilla muy blanda (también sin lactosa)
  • 70 g azúcar granulada
  • 50 g granillo de avellanas
  • 50 g granillo de almendras o pistacho
  • 50 g cacao amargo en polvo (también sin gluten)
  • 50 ml leche (también sin lactosa)
  • 1 g sal fina
  • 1 huevo entero mediano
  • 250 g chocolate negro al 50%
  • 5 cucharadas leche (también sin lactosa)
  • 1 cucharadita aceite de girasol

Pasos

En un bol grande tamizamos la harina y el cacao amargo en polvo.

Añadimos todos los demás ingredientes y, ayudados por las varillas de una batidora, mezclamos hasta que estén perfectamente integrados. Obtendremos una mezcla bastante firme y consistente.

Encendemos el horno y lo llevamos a 170*.

Forramos una bandeja con papel de horno. Ayudados por dos cucharaditas, o una manga pastelera, formamos bolitas un poco más pequeñas que una nuez, que colocaremos bastante juntas para evitar que se aplanen demasiado durante la cocción.

Horneamos a media altura, durante 15/17 minutos como máximo (cuidado con no prolongar la cocción, porque podrían quemarse; están listas cuando se vuelven opacas y se siente su aroma).

Apagamos inmediatamente, las sacamos y dejamos enfriar completamente antes de glasearlas.

Mientras tanto, trituramos groseramente el chocolate negro y sacamos del frigorífico la leche que necesitaremos, para tenerla a temperatura ambiente.

Para el glaseado.

Cuando los bombones estén completamente y perfectamente fríos, preparamos el glaseado de chocolate negro.

Si fundimos el chocolate al baño maría, hacemos lo siguiente: vertemos dos dedos de agua en un cazo y colocamos encima un bol de acero o vidrio termo resistente en el que pondremos el chocolate negro triturado y la leche (La leche se pone inmediatamente, antes de comenzar a fundir el chocolate, porque de lo contrario el glaseado «se estropearía», es decir, se volvería grumoso y sería difícil recuperarlo, al igual que es importante que ninguna gota de agua llegue al chocolate que se está fundiendo).

Encendemos el fuego más pequeño y lo ponemos al mínimo.

Preparamos una bandeja cubierta con papel de horno.

Mezclamos continuamente el glaseado con una varilla de acero, hasta obtener una mezcla suave y brillante. Apagamos inmediatamente pero no alejamos el chocolate fundido del calor subyacente.

Dejamos pasar 5 minutos, añadimos el aceite de girasol (de sabor delicado), mezclamos bien y comenzamos a glasear las trufas.

Podemos sumergirlas en el glaseado una a una, usando un tenedor para dejar escurrir el exceso de glaseado. Luego, colocamos cada bombón glaseado sobre una bandeja cubierta con papel de horno y los dejamos estar hasta que el glaseado esté perfectamente seco. Luego, podremos colocarlos en moldes de papel individuales y conservarlos en una caja de lata. Recomiendo dejarlos reposar durante una noche entera en un lugar fresco, bien cubiertos, antes de degustarlos, porque de esta manera las trufas liberarán todo su maravilloso sabor.

La idea adicional. Añadimos ralladura muy, muy finamente al chocolate triturado y la leche para dar un toque adicional a este delicioso glaseado.

Cuando hayamos terminado de glasear todas las trufas, podríamos pasarlas por el granillo de frutos secos, por fideos de colores, etc. para hacerlas aún más bonitas y refinadas.

Buen provecho

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mielefarinaefantasia

Recetas fáciles para el día a día y ocasiones especiales, para todos los días y para todos los gustos, incluso sin gluten.

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