Las trufas de colomba con coco y café son unos dulces facilísimos y deliciosos que no necesitan cocción, ideales tanto para aprovechar restos de colomba pascual como para presentarla de una manera diferente y sofisticada. Las trufas se preparan en muy poco tiempo y podemos personalizarlas como más nos guste, añadiendo otras especias, licor al gusto, y así sucesivamente, para crear diferentes tipos, para todos los gustos.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 20
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Pascua
Ingredientes
- 250 g colomba pascual
- 60 ml café negro
- 100 g queso robiola
- c.s. coco rallado (rapè)
- c.s. cacao en polvo sin azúcar
Pasos
Picamos la colomba a cuchillo, la ponemos en un bol, la mojamos con el café frío y la dejamos humedecer durante 5 minutos.
Transferimos la mezcla a una batidora, añadimos el queso robiola y batimos hasta obtener una mezcla suave pero densa, perfecta para formar las trufas. Si la mezcla estuviera demasiado dura para batirla, podemos añadir algunas cucharaditas más de café o de leche.
Dividimos la mezcla en dos partes.
En una de estas añadimos también una cucharada rasa de coco rallado y mezclamos.
Con la ayuda de dos cucharitas, tomamos una cantidad de la mezcla de coco del tamaño de una nuez o un poco más y la ponemos en un plato. Continuamos hasta terminar la mezcla de coco
Hacemos lo mismo con la otra parte que pondremos en otro plato, para distinguirlas.
Las cubrimos y las ponemos en la nevera durante dos horas, para que se endurezcan.
Ponemos coco rallado en un cuenco y cacao en polvo sin azúcar en otro.
Sacamos del frigorífico las trufas de coco y las pasamos por el coco rallado hasta cubrirlas completamente.
Sacamos también las otras del frigorífico que, en cambio, pasaremos por el cacao en polvo sin azúcar.
Componemos un plato para servir con nuestras deliciosas trufas de coco y café y las servimos inmediatamente o las dejamos descansar por unas horas más en la nevera, si hace calor, o a temperatura ambiente.
¡Buen provecho!