Preparación de la schiacciata crujiente de calabacines y tomatitos

• Lavamos los calabacines, los despuntamos por un lado y los rallamos con un rallador de agujeros grandes, recogemos los calabacines en un bol y añadimos los tomatitos lavados y cortados en gajos.

• En el mismo bol añadimos la harina, el queso rallado, una cucharada de aceite (tomada del total indicado en la receta) y sal, pimienta y orégano.

• Con la ayuda de una cuchara empezamos a mezclar, la harina al mezclarse con el agua y los calabacines deberá crear una especie de masa bastante espesa y obtendremos una mezcla suave pero no demasiado líquida.

• Ahora forramos nuestra bandeja con una hoja de papel de horno, rociamos con dos cucharadas de aceite y luego vertemos la mezcla recién hecha, cubrimos con otra hoja de papel de horno ligeramente engrasado y con las palmas de las manos aplastamos hasta cubrir toda la superficie de la bandeja.

• Ahora espolvoreamos la schiacciata con pan rallado y más queso parmesano rallado, otras dos cucharadas de aceite y horneamos en la parte central del horno.

• Dejamos cocinar nuestra schiacciata durante unos 30′ controlándola de vez en cuando (los tiempos pueden variar de un horno a otro), estará lista cuando la superficie esté dorada y los bordes se hayan vuelto crujientes.

  

• Sacamos la schiacciata del horno y dejamos que se temple ligeramente antes de cortarla en cuadrados y eventualmente conservarla en aluminio si debemos llevarla fuera de casa.