Si no te gusta mucho la carne de pavo, te aseguro que cocinada así te encantará. En mi casa a menudo me piden que la repita y, yo misma, me encuentro deseando comerla de nuevo. Así que hoy quiero sugerirte que pruebes esta deliciosa ensalada de pavo y patatas a la cual también le he añadido guisantes y semillas de amapola. Un plato completo; una sola preparación que siempre pone de acuerdo a todo el mundo y no necesita nada más. La comida está servida. ¡Dulce y listo! Lo bueno de este plato es que se puede preparar con antelación y consumir tibio, a temperatura ambiente o incluso frío. Esto lo convierte en una receta perfecta para las cuatro estaciones.
Otras ideas con pavo:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 8 Horas
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Hornillo, Hervir
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la ensalada de pavo y patatas
- 700 g pechuga de pavo
- 500 ml agua
- 500 ml vino blanco seco
- 3 hojas laurel
- 50 ml vinagre de vino blanco
- 25 g sal gruesa
- 600 g patatas (peso neto)
- 300 g guisantes congelados
- 1 cebolla dorada (o blanca)
- 2 hojas salvia
- semillas de amapola (opcionales)
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta negra
Herramientas
- 1 Cuenco
- 1 Cacerola con tapa
- 1 Sartén
- 1 Pelador de patatas
Preparación de la ensalada de pavo y patatas
¡Mientras se cocina la carne, ocúpate de los guisantes y las patatas!
Pon el agua, el vino, el vinagre, las hojas de laurel y la sal gruesa en un cuenco grande y mezcla bien hasta que la sal se haya disuelto completamente. Luego sumerge la carne, cúbrela con film transparente y déjala marinar en el frigorífico durante al menos 8 horas (yo suelo dejarla toda la noche).
Transcurrido este tiempo, transfiere la carne y el marinado a una cacerola, pon la tapa y cocina a fuego lento durante unas 2 horas (el líquido debe apenas hervir a fuego lento).
Una vez cocida, apaga el fuego y deja que la pechuga de pavo se enfríe en el agua (de esta manera absorberá perfectamente todos los aromas del marinado). Si preparas esta ensalada en verano y quieres servirla fría, puedes dejar que la carne se enfríe completamente en su agua.
Finalmente, desmenuza la carne con las manos.
En una sartén, calienta unas cucharadas de aceite, luego añade la cebolla finamente picada. Cuando empiece a chisporrotear, agrega los guisantes aún congelados, un par de cucharadas de agua y una pizca de sal.
Cocínalos a fuego alto durante unos diez minutos, removiendo a menudo, luego retíralos de la sartén y déjalos a un lado.
Mientras tanto, pela las patatas, lávalas y córtalas en cubos.
En la misma sartén de los guisantes, vierte dos cucharadas de aceite y dora las patatas junto con la salvia. Cocínalas hasta que estén doradas y crujientes (no deben deshacerse, ¡cuidado!). Sazónalas solo al final, mezcla y apaga el fuego.
En este punto, no queda más que unir todos los ingredientes.
En una ensaladera, coloca la carne de pavo desmenuzada, los guisantes y las patatas. Condimenta con sal y pimienta negra al gusto y rocía con un poco de aceite. Mezcla todo con cuidado.
Finalmente, transfiere la ensalada de pavo y patatas al plato de servir y espolvorea con semillas de amapola, si te gustan. ¡Disfruta! Paola
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