Hoy manos a la masa y preparemos unas deliciosas galletas de almendra y chocolate. Son crujientes, fáciles de preparar y la cobertura de chocolate negro las hace realmente irresistibles. Se conservan por unos días en una caja de lata (pero no creo que haga falta). ¿Apostamos?
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de reposo: 2 Horas
- Tiempo de preparación: 40 Minutos
- Porciones: 25 galletas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para 25 galletas de almendra y chocolate
Si no tienes harina de almendra, puedes triturar finamente la misma cantidad de almendras peladas.
- 150 g harina 00
- 60 g harina de almendra
- 80 g azúcar glas
- 1 pizca sal
- 1 sobre vainillina
- 90 g mantequilla
- 1 huevo (mediano)
- 200 g chocolate negro
Utensilios
- 1 Bol
- Batidor de mano
- Rodillo
- 1 Cortador de galletas de forma de corazón de 5,5 cm
- 2 Bandejas de horno
- 1 Cazo para baño maría
- 1 Rejilla para dulces
Preparación de las galletas de almendra y chocolate
En un bol, pon la harina de almendra, la harina blanca, la vainillina, el azúcar glas, una pizca de sal y mezcla con un pequeño batidor de mano.
Luego añade la mantequilla en trozos y la yema (reserva la clara) y comienza a amasar.
En este punto la masa podría quedar bastante desmenuzada. Entonces, añade la clara necesaria para que sea fácil de trabajar. Yo añadí en total 20 g de clara.
Transfiere la masa a la mesa y trabaja hasta que esté lisa y homogénea. Forma una bola, envuélvela en film transparente y déjala reposar en la nevera durante al menos una hora.
Pasado el tiempo de reposo, extiende la masa con el rodillo en una lámina de unos 3/4 mm de espesor (te recomiendo ponerla entre dos hojas de papel de horno) y corta las galletas. Yo hice corazones, pero puedes darles la forma que prefieras.
Colócalas en las bandejas cubiertas con papel de horno y hornéalas en el horno estático precalentado a 180°C por 12/15 minutos. Necesitarás hacer dos tandas. Una vez listas, estarán muy blandas. No las toques y, sobre todo, no las vuelvas a meter en el horno. Están perfectas así; se endurecerán al enfriarse.
Corta el chocolate en trozos, ponlo en un cazo para baño maría (cazo) y derrítelo a fuego lento.
Cuando las galletas de almendra se hayan enfriado, sumérgelas por la mitad en el chocolate fundido, luego colócalas en una rejilla o en una hoja de papel de horno y déjalas secar perfectamente.
Guarda las galletas de almendra y chocolate en una caja de lata. ¡Disfruta! Paola
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