Hoy quiero compartir con vosotros la receta de esta sabrosa tarta salada de pasta filo. Está rellena con patatas, quesos, mortadela (pero también podría ser jamón cocido) y huevos. Es fácil de preparar y se presta a ser servida también como entrante. La pasta filo le confiere una textura crujiente realmente muy agradable y la hace especial en su gran simplicidad. No puedo más que recomendaros que la probéis.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Horno, Microondas, Hervido
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la tarta salada de pasta filo
Para realizar esta tarta salada yo he usado 10 hojas de pasta filo de 37 x 25 cm: 2 para la base y 8 para la cobertura. En el mercado existen de varios tamaños, así que ajusta un poco a ojo según el tamaño de las que encuentres. Las puedes cortar o doblar tranquilamente. Lo importante es manejarlas con cuidado porque son bastante delicadas y tienden a secarse rápidamente.
Si lo prefieres, puedes sustituir la fontina por scamorza y la mortadela por jamón cocido.
- pasta filo (10 hojas)
- 250 g patatas (peso neto)
- 100 g fontina
- 60 g mortadela
- 40 g tomates secos en aceite
- 2 huevos (medianos)
- 70 ml leche
- 30 g Grana Padano rallado (o Parmesano)
- 1 pizca ajo en polvo
- 1 ramita perejil
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta negra
Herramientas
- 1 Olla
- 1 Molde de 26 cm de diámetro
- 1 Bol
- 1 Batidor de mano
- 1 Pincel
Preparación de la tarta salada de pasta filo
Hervir las patatas sin cocerlas en exceso, porque no deben desmoronarse.
1) Yo las cociné en el microondas: las pelé, lavé y corté por la mitad a lo largo. Luego las puse en un recipiente de vidrio, añadí un poquito de agua, puse la tapa y las cociné a máxima potencia (900 W) durante 4 minutos.
2) Por supuesto, también podéis cocerlas en el fogón partiendo de agua fría con sal. En este caso, no las peléis para que no absorban demasiada agua.
Pincelar con un poco de aceite una fuente redonda de 26 cm de diámetro. Luego colocar en el fondo una hoja de pasta filo. Recortarla a medida y pincelarla con un poco de agua. Doblar hacia adentro las puntas de la hoja. Repetir la misma operación con una segunda hoja de pasta.
Ahora colocar sobre una superficie una tercera hoja de pasta y arrugarla como se muestra en la fotografía. No es necesario ser preciso. Luego enrollarla sobre sí misma formando una especie de caracol y colocarla en el centro del molde.
Arrugar también las hojas restantes y colocarlas, poco a poco, alrededor del caracol central hasta cubrir todo el fondo de la fuente.
Cortar las patatas hervidas en rodajas e insertarlas aquí y allá entre los pliegues de la pasta.
De la misma manera, insertar en los pliegues de la pasta la fontina cortada en trozos, los tomates secos cortados en tiras y la mortadela cortada en lonchas no demasiado finas.
Cascar los huevos en un bol, condimentarlos con un par de generosos pellizcos de sal y una abundante cantidad de pimienta negra recién molida. Añadir también la leche y batir con un pequeño batidor de mano el tiempo necesario para amalgamar las yemas y las claras.
Luego añadir el queso rallado, una pizca de ajo en polvo, perejil picado y amalgamar perfectamente todos los ingredientes.
Finalmente, verter esta mezcla entre los pliegues de la tarta salada.
Cocinar la tarta salada de pasta filo en horno estático precalentado a 180° durante 30/35 minutos. Al final de la cocción deberá resultar bien dorada. Dejarla templar antes de servirla. ¡Disfruta! Paola.
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