El hummus de garbanzos y tomates secos es una salsa especiada típica del Medio Oriente, que se sirve como aperitivo, acompañado de crostini, grissini o incluso verduras crudas. Es excelente todo el año, pero en verano, disfrutado con los tomatitos de temporada, quizás al aire libre, bajo el atardecer, es aún más delicioso. En ese caso, se puede servir también como plato frío único, acompañado con palitos de verduras crudas y crostini, taralli, grissini, etc., en mi caso de la empresa «L’arte dei Sapori», que se encuentra entre las colinas del Sannio.
Usando garbanzos enlatados, ya cocidos, solo se necesitan unos veinte minutos para preparar este hummus, por lo que también podéis prepararlo si tenéis invitados inesperados.
Si os gustan los platos del Medio Oriente, probad también estas mis recetas:
- Dificultad: Fácil
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Medio Oriente
- Estacionalidad: Verano, Ferragosto
Ingredientes
- 240 g garbanzos enlatados (escurridos)
- 1 cucharada zumo de limón
- 1 cucharada aceite de oliva virgen extra
- 1 diente ajo
- 50 g tomates secos en aceite
- 10 hojas albahaca
- 1/3 cucharadita comino en polvo
- 1/2 cucharadita pimentón dulce
- al gusto sal
- 35 g tahina
- al gusto agua fría
- al gusto pimentón dulce
- al gusto aceite de oliva virgen extra
- 4 filetes tomates secos en aceite (cortados en tiras)
- 8 tomatitos cherry
- 5 tomatitos amarillos
- al gusto albahaca
- 1 cucharada piñones (tostados)
Pasos
Para preparar el hummus de garbanzos y tomates secos, poned en la batidora los garbanzos, el zumo de limón, el aceite de oliva virgen extra, el diente de ajo, los tomates secos en aceite con una cucharada de su aceite, la albahaca previamente lavada, el pimentón, el comino, una pizca de sal y la tahina.
Poned en marcha la batidora y mezclad durante unos segundos. Añadid entonces 2 cucharadas de agua fría y continuad mezclando hasta obtener una consistencia cremosa y homogénea. Si es necesario, ajustad la sal, las especias y el zumo de limón. Si el hummus sigue siendo demasiado espeso para vuestro gusto, añadid un poco más de agua fría y mezclad de nuevo.
Transferid el hummus a un plato, creando una especie de disco plano sobre el cual haréis un remolino con una cuchara y luego decorad con una pizca de pimentón dulce, un chorrito de aceite de oliva virgen extra, tomates secos, tomatitos cherry y amarillos previamente lavados y cortados a la mitad o en cuartos, hojas de albahaca y piñones tostados al gusto.
Servid vuestro hummus de garbanzos y tomates secos acompañado de taralli, grissini, crostini o incluso palitos de verduras crudas.
