Pizza roja con orégano: una pizza sencilla de preparar condimentada con tomate, aceite y orégano.
La pizza roja con orégano es muy fácil de preparar: basta con poner todos los ingredientes en un bol y amasar. Los ingredientes necesarios son pocos y normalmente los tenemos en casa.
La pizza roja con orégano es perfecta para la merienda, para el almuerzo, como entrante o aperitivo en una fiesta de buffet. Por supuesto, no os voy a engañar, yo la comería a cualquier hora.
Pero veamos enseguida cómo preparar la pizza roja con orégano.
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- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 2 bandejas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 300 g harina 00
- 250 g agua
- 1 sobre levadura de cerveza seca
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharaditas sal
- 1 cucharadita azúcar
Herramientas
- 1 Bol
- 1 Tenedor
- 2 Bandejas
- 1 Papel para hornear
- 1 Papel film
Cómo preparar la pizza roja con orégano
Coloca todos los ingredientes en un bol. Comienza a mezclar bien con el tenedor, luego trabaja la masa con las manos. Te advierto: la masa queda suave y pegajosa, así que tendrás que prestar un poco de atención.
Coloca la masa en un bol, cúbrela con papel film y deja que fermente hasta que duplique su volumen. Tardará unas dos horas.
Divide la masa en dos partes iguales. Forra una bandeja para horno de 32 cm con papel para hornear y úntala con abundante aceite. Si quieres echar un vistazo a mi bandeja haz clic aquí.
Toma una de las dos masas y colócala en el molde. Extiende bien la pizza con las manos. Te aconsejo que te untes bien también las manos, porque como te decía arriba, la masa es pegajosa.
Haz lo mismo con la masa restante.
Deja fermentar nuevamente durante unos 30 minutos.
Condimenta las pizzas con abundante puré de tomate (ponlo también en los bordes). Añade el orégano según tus gustos, el aceite en hilo y finalmente la sal.
Hornea en horno caliente, estático a 180 grados y deja cocinar durante 20 minutos. Luego 200 grados ventilado durante 10 minutos. Naturalmente ajústate según tu horno.
Saca del horno y sírvete.
