Ciertamente los pasteles comprados en el supermercado son atractivos a la vista, perfectos y atraen a los niños con las sorpresas de regalo, pero les puedo asegurar que estos Pasteles de leche no tienen nada que envidiarles. Son súper deliciosos y, sobre todo, no contienen conservantes. Ideales para la pausa de la mañana o la tarde, por ejemplo, podemos prepararlos y envolverlos uno por uno con film, se mantendrán perfectamente. En conclusión, prueben a hacerlos al menos una vez, verán qué buenos están.
Receta del 14/08/2016 actualizada
Otras recetas

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 40 Minutos
- Porciones: 6
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 4 huevos (medianos)
- 70 g azúcar
- 40 ml aceite de maíz
- 50 ml agua
- 50 g harina 00
- 20 g cacao amargo en polvo
- 4 g levadura en polvo para pasteles
- 10 g miel de acacia
- 1 g sal fina
- 5 g azúcar (para espolvorear sobre la pasta de bizcocho cocida)
- 170 ml leche condensada
- 200 ml nata para montar
- 15 g miel de acacia
- 8 g gelatina
- 1/2 vaina de vainilla
- 20 ml leche entera
Herramientas
- Báscula de cocina
- Bol
- Batidora eléctrica
- Espátula de silicona
- Tamiz
- Bandeja de horno cm. 32 x 23
Pasos
Remojar la gelatina en agua fría durante 10 minutos. En un bol montar la nata mientras que en otro verter la leche condensada con la adición de la miel y la gelatina escurrida y derretida en la leche caliente.
Al compuesto con la leche condensada añadir poco a poco la nata montada y mezclar bien. Verter la crema de leche en un bol limpio y cubrirla en contacto con film para que no se forme una costra. Llevar al frigorífico para que se endurezca durante 1 hora.
Encender el horno en modo estático a 175 grados y mientras tanto preparar la pasta de bizcocho. Dividir las yemas de las claras en dos boles. En el bol con las yemas añadir el azúcar y batir a crema con las varillas. Agregar el aceite y, siempre usando las varillas, verter también el agua y el pellizco de sal. Con el tamiz añadir poco a poco la harina y la levadura.
Continuar añadiendo, siempre con el tamiz, el cacao y, siempre con las varillas, incorporarlo a la mezcla. Batir las claras a punto de nieve firme e incorporarlas poco a poco a la mezcla usando la espátula y mezclando delicadamente de abajo hacia arriba para no desmontarlas. Verter la mezcla en una bandeja rectangular forrada con papel de horno, nivelar bien y hornear a media altura. Dejar cocinar durante 13 minutos controlando que no se dore demasiado. Una vez horneado, espolvorear la superficie con azúcar, cubrir con film y voltear sobre una hoja de papel de horno. Dejar enfriar.
Tomar la pasta de bizcocho y quitar el film. Recortar los bordes y cortarla en dos partes. Sacar del frigorífico la crema de leche, mezclarla nuevamente para suavizarla y verterla sobre una mitad. Nivelarla y cubrir con la otra mitad. Envolver nuevamente con papel de horno y mantener en la nevera para que se endurezca bien. Al momento de servir, cortar los Pasteles de leche con un cuchillo afilado del tamaño que prefieras, yo hice 10×4, sin embargo, también son muy bonitos cuadrados. Conservar en el frigorífico por no más de 2 días.