Calabaza al horno con cebolla y romero, fácil y deliciosa, para la receta yo usé la calabaza Hokkaido, una calabaza de sabor intenso, dulce y aromático, perfecta para consumir incluso con la piel fina, en lugar de la calabaza Hokkaido se puede usar también otros tipos, muy buena también la delica, la butternut o la violina, pero otros tipos también serán perfectos. Excelente al horno porque se cocina prácticamente sin ningún esfuerzo, basta con cortarla, condimentarla y ponerla en la bandeja. Para realzar su sabor me gusta añadir pimienta negra y romero, esta vez añadí también una pequeña cebolla roja de Tropea cortada gruesa para que no se queme, y qué decir, es simplemente deliciosa, en menos de media hora ya estaba lista para disfrutar. Aquí mi colección de recetas con calabaza.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes calabaza al horno con cebolla y romero
- 800 g calabaza hokkaido u otra
- 1 cebolla
- c.s. romero
- c.s. sal
- c.s. pimienta negra
- c.s. aceite de oliva
Herramientas para preparar la calabaza al horno con cebolla
- 1 Tabla de cortar
- 1 Cuchillo
- 1 Pelador de patatas
- 1 Cuenco
- 1 Fuente para horno
Pasos preparación calabaza al horno con cebolla
Cortamos la calabaza en trozos, luego con una cuchara la vaciamos para quitar semillas y filamentos internos. Con un pelador la pelamos, pero la calabaza Hokkaido es excelente incluso con la piel, y los tiempos de cocción son los mismos, así que decidid si pelarla, pelarla en parte o no pelarla en absoluto. La cortamos en trozos y la lavamos.
Añadimos a la calabaza en un cuenco también una cebolla cortada en trozos no demasiado pequeños.
Condimentamos con aceite, sal, romero troceado y pimienta negra, luego mezclamos bien.
Transferimos a una fuente para horno y cocinamos en horno caliente ventilado durante unos 30 minutos a 200°C. Comprobamos de vez en cuando para verificar la cocción, dependiendo del horno podría ser necesario bajar un poco la temperatura, en el mío quedó perfecta en menos de media hora.
Sacamos del horno y nuestra calabaza al horno con cebolla y romero está lista para disfrutar, pero para evitar quemaduras esperamos siempre unos minutos antes de servirla.
La calabaza al horno si sobra se puede conservar en la nevera durante un par de días, excelente para comer tanto fría como caliente, si se quiere prolongar el período de conservación se puede condimentar con un poco de vinagre, y en este caso es una delicia fría, pero nadie prohíbe calentarla, así se obtendrá una deliciosa calabaza agridulce, quizás con la adición de un poco de miel de acacia.
Si queréis podéis añadir a la calabaza también patatas, o pollo, así será un buen plato único.
