Estos bombones de calabaza son deliciosos cofres de chocolate negro que encierran un relleno suave y especiado de calabaza. Para el relleno, primero hice una crema con queso para untar, azúcar glas y chocolate blanco; luego incorporé galletas secas desmenuzadas y finalmente un puré de calabaza y una mezcla de especias. Hacer estos bombones es muy sencillo y son perfectos para cualquier ocasión, además de ser una forma original de disfrutar de la calabaza.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 20 Piezas
Ingredientes
- 70 g puré de calabaza
- 30 g Queso para untar
- 15 g Azúcar glas
- 80 g Chocolate blanco
- 75 g Galletas secas
- mezcla de especias (nuez moscada, canela, jengibre y clavo)
- 200 g Chocolate negro
Preparación
Para hacer los bombones de calabaza, primero prepara el puré de calabaza: limpia y corta la calabaza en trozos, quitando las semillas y la cáscara. Coloca los trozos de pulpa de calabaza en la bandeja del horno forrada con papel de horno. Hornea en el horno precalentado a 180°C durante unos 40 minutos.
Cuando la calabaza esté ligeramente asada y blanda, sáquela del horno y aplástala con un tenedor. Pon el puré de calabaza en un colador para quitar el exceso de agua.
En un bol, trabaja el queso para untar con el azúcar glas. Derrite el chocolate blanco al baño maría y agrégalo a la crema de queso.
En una batidora, desmenuza finamente las galletas secas, reserva una cucharada para la decoración y el resto viértelo en el bol con la crema. Añade también el puré de calabaza y la mezcla de especias. Mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Cubre con film de cocina y ponlo en el frigorífico durante 2 horas.
Después, con las manos o con la ayuda de una cucharita, coge un poco de la mezcla y forma bolitas del tamaño de una nuez, o del tamaño deseado. Coloca las bolitas sobre una bandeja forrada con papel de horno. Mételas en el congelador durante una hora.
Derrite el chocolate negro y sumerge una a una las bolitas de calabaza. Colócalas sobre una bandeja forrada con papel de horno y decora con las galletas desmenuzadas reservadas. Pon los bombones en el frigorífico para que se endurezca el chocolate. ¡Buen provecho!
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