El rollo de cacao con crema de mascarpone y chocolate blanco es un suave dulce con un relleno rico y sabroso. He realizado un suave rollo que he rellenado con crema blanca de avellanas (que puedes hacer en casa haciendo clic aquí) y una crema de mascarpone y chocolate blanco. Para terminar, he adornado el rollo con unas cucharadas de crema blanca de avellanas y he servido el rollo cortándolo en rodajas. ¡Con este dulce conquistarás a tus comensales!
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Rollo o tronco: recetas dulces y saladas
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 6 Personas
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
Ingredientes
- 3 huevos
- 150 g azúcar
- 1 cucharada agua caliente
- 1 cucharadita extracto de vainilla
- 25 g cacao amargo en polvo
- 1 cucharadita levadura en polvo para pasteles
- 50 g harina
- 250 g mascarpone
- 30 g azúcar
- 50 g chocolate blanco
- c.s. crema blanca de avellanas
Utensilios
- Batidora
- Bandeja de horno
Preparación
Para realizar el rollo de cacao, separar las yemas de las claras. En un bol, montar a punto de nieve las claras con 50 gramos de azúcar.
En otro bol, montar las yemas con 100 gramos de azúcar, el agua y el extracto de vainilla. Verter las claras e integrarlas a las yemas con una espátula y con un movimiento de abajo hacia arriba.
Luego, incorporar el cacao amargo, siempre con un movimiento de abajo hacia arriba. Por último, añadir la harina tamizada con la levadura. Mezclar los ingredientes hasta obtener una mezcla lisa y homogénea.
Verter la mezcla en la bandeja (35×25 cm) revestida con papel de horno. Cocer en el horno precalentado a 180° por 10-12 minutos.
Una vez cocido, sacarlo del horno y dejar enfriar volcándolo sobre otra hoja de papel de horno.
En un bol, trabajar el mascarpone con el azúcar hasta obtener una crema. Luego, incorporar el chocolate blanco derretido al baño maría (templado).
Tomar el rollo, con la ayuda de un pincel, humedecer el papel de horno con un poco de agua, para despegarlo del rollo.
Alinear los bordes externos del rollo con un cuchillo afilado. Rellenar con una fina capa de crema blanca de avellanas (aquí la receta para hacerla en casa).
A continuación, rellenar con la crema de mascarpone, dejando un par de centímetros de espacio en el borde de uno de los dos lados más largos.
Enrollar sobre sí mismo desde el lado más largo y cerrar bien con el papel de horno. Poner en el frigorífico un par de horas para que se solidifique.
Luego, servir con unas cucharadas de crema blanca de avellanas. ¡Disfruta!
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